Más de un centenar vecinos de Ardales y Carratraca se concentran para exigir una mejora en la atención sanitaria

El objetivo de la nueva mesa ciudadana es reivindicar la necesidad de una mejor asistencia sanitaria en ambos pueblos, ya que los vecinos de ambas localidades han vivido situaciones similares a la de Hugo, en las que la tardanza del servicio de urgencias ha ocasionado más de una desgracia. «Ha habido varios vecinos que han perdido la vida por sufrir un infarto y no haber sido atendidos a tiempo por la tardanza de la ambulancia», cuenta a SUR el alcalde de Carratraca, Antonio Sepúlveda, quien no ha faltado a la concentración. La reivindicación por parte de su pueblo se une a la que hacen en Ardales, donde reiteran que no quieren sentirse ciudadanos «de segunda», sino tener una sanidad digna para su pueblo.

Nueva ambulancia

Fue hace un mes cuando la Junta de Andalucía anunció la dotación a Ardales de una nueva ambulancia más para dar servicio a toda la comarca del Valle del Guadalhorce. «Actualmente, el municipio de Ardales dispone de una ambulancia medicalizada 24 horas al día, 365 días del año, este recurso no existe en ningún otro municipio del distrito sanitario y presta servicio los días laborables para transportes no asistidos en distintos centros del distrito, mientras que el resto del tiempo se encuentra a disposición de los vecinos de Ardales», comunicaron desde el gobierno autonómico. Sepúlveda, por su parte, señala que desde ambos pueblos lo que solicitan es un punto de urgencia común para que, en caso de que ocurra algo, no haya que trasladarse hasta Álora o hasta el Hospital Valle del Guadalhorce.

«La Junta dice que tenemos médicos de 8.00 a 15.00 horas, eso es incierto, solo tenemos dos horas al día, lo que da para atender como máximo a ocho pacientes, ya que tienen que hacer visitas domiciliarias, llamadas y otras acciones, eso es insuficiente para un pueblo como el nuestro en el que la población es mayoritariamente envejecida», asume el regidor municipal de Carratraca. Entre los presentes en la concentración–la segunda organizada por la plataforma en una semana–otros vecinos, como Luis (nombre ficticio) recuerda cómo en una fiesta de Carratraca se empezó a encontrar mal a raíz de alguna sustancia que le habían echado en la bebida, sin poder ni andar, y la ambulancia tardó una hora y media en llegar, por lo que al llegar ya se le había pasado el efecto.

A pesar de que la reestructuración de las ambulancias en la localidad anunciadas por el Área Sanitaria Valle del Guadalhorce comunicaba la inclusión de un enfermero las 24 horas, y que dará servicio a todo el distrito sanitario, el alcalde de Ardales, Juan Alberto Naranjo, asegura que esta modificación en el municipio «supone una mejora, pero no es la solución ya que en los dos últimos casos la ambulancia tardó en llegar 56 minutos», a lo que añade que la falta de pediatría en ambos pueblos también es una reivindicación por parte de esta nueva mesa ciudadana, ya que son 300 los niños que hay, tanto en Ardales como en Carratraca, que tienen que acudir a Álora cada vez que necesitar ir al médico.

La portavoz de la plataforma, Toñi Paz, remarca que el problema nace de la falta del servicio de médicos 24 horas en cada uno de los pueblos, ya que la ambulancia solo puede salir cuando el médico esté operativo en su horario laboral. «Es como si no tuviéramos nada, los fines de semana tenemos un médico por el que el ayuntamiento paga 50.000 € al año a modo de refuerzo, así que no puede usar las ambulancias», señala. Desde el gobierno autonómico señalan que aún no está en funcionamiento la nueva ambulancia que dará servicio a toda la comarca, cuya asistencia sanitaria en Ardales se llevará a cabo por dos médicos de familia a jornada completa, además de tres enfermeras a jornada completa, dos en Ardales y una en Carratraca.