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Esperanza Oña, Pablo Casado, Juanma Moreno, Elías Bendodo y Loles López, ayer tras los discursos en Álora.

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Esperanza Oña, Pablo Casado, Juanma Moreno, Elías Bendodo y Loles López, ayer tras los discursos en Álora. Salvador Salas

Pablo Casado alaba a Esperanza Oña y Francisco De la Torre en un discurso con sabor a precampaña

El líder nacional del PP abre el curso político en la provincia de Málaga pidiendo a los andaluces que permitan el cambio en la Junta «tras 40 años de corruptelas»

Sábado, 1 de septiembre 2018, 01:08

El 'día de los huevos fritos', como ya se conoce el gran acto que celebra el Partido Popular de Málaga el último día de agosto, ya se ha convertido en un clásico en la cronología de inicio del curso político en Andalucía. Delegaciones de toda la provincia acuden a esta reunión que siempre se celebra en algún punto del interior de la provincia, y que además de demostrar lo bien que los líderes populares fríen huevos en una sartén, también sirve para marcar las pautas políticas del PP los próximos meses.

Sin embargo, la edición de este año –celebrada bajo un intenso calor en el histórico restaurante Los Caballos en Álora– tenía especial relevancia por dos motivos: el primero de ellos es que, salvo sorpresa mayúscula, la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, convocará elecciones anticipadas estas próximas semanas, lo que a su vez dará comienzo a una campaña electoral cuyo resultado es impredecible. Pero además, esta era la primera ocasión que el líder nacional de los populares acudía a este evento, ya que Rajoy nunca acudió en los años que han precedido.

De esta manera, el presidente nacional del PP, Pablo Casado, aterrizaba en la provincia de Málaga tras haber ganado unas elecciones internas en las que los populares malagueños –salvo algunas excepciones– apoyaron de forma mayoritaria a su rival, Soraya Sáenz de Santamaría. Aunque todos los líderes relevantes del PP en Málaga siguen teniendo su cuota de protagonismo, sí se pudieron ver algunas caras nuevas que, tras defender la candidatura de Casado, tienen ahora algo más de protagonismo. Ese es el caso del exdiputado y docente, Miguel Ángel Ruiz; así como el consultor Juande Villena.

Además, Pablo Casado destacó en el marco de su discurso la gestión de Esperanza Oña en su etapa como alcaldesa de Fuengirola; así como la de Francisco de la Torre en Málaga. Ambos líderes apoyaron también al líder nacional del PP durante la campaña, aunque en el caso de De la Torre dicho apoyo se dio después de que María Dolores de Cospedal se quedara fuera de la carrera.

Casado estructuró su discurso en tres grandes bloques: Cataluña, inmigración y economía. En este último punto fue en el que citó a ambos líderes municipales. Con respecto a la subida de impuestos a las rentas más altas anunciadas por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, Casado hizo referencia a la exalcaldesa. «Ahí está el ejemplo de Esperanza Oña, que durante su mandato en Fuengirola bajó todos los impuestos y además mejoró la calidad de vida de sus vecinos», señaló.

En cuanto a De la Torre, el presidente del PP le preguntó de forma retórica que qué pensaba del anunciado impuesto a las empresas tecnológicas, y puso como ejemplo la apuesta por esta materia de su gobierno municipal. «Paco ha hecho una gestión excelente, como la hizo Celia», señaló Casado, que alabó a la exregidora apenas unos días después de haberla retirado de la Diputación Permanente del Congreso tras 29 años en el puesto.

«A ganar» en Andalucía

Con la presencia de Juanma Moreno en el acto, sumado al eventual adelanto electoral, Pablo Casado realizó constantes menciones a la actualidad andaluza. Defendió y destacó la labor de oposición de Moreno; y dijo estar «convencido» de que éste será el próximo presidente de la Junta de Andalucía «sean cuando sean las elecciones».

Con este aroma a precampaña que ha sobrevolado todos los actos políticos de los partidos andaluces este verano, Casado se dirigió directamente a los votantes andaluces, a los que pidió que permitan la alternancia «tras 40 años de corruptelas».

Casado usó las llamativas palabras de este pasado jueves de la ministra de Trabajo, Magdalena Valerio –en la que afirmaba que le habían «metido un gol» con el sindicato de las trabajadoras sexuales– para hilar todo su discurso sobre los tres asuntos clave; un recurso que utilizó de nuevo para referirse a esta comunidad autónoma. «Este es el gol que no nos pueden meter más. Vamos a pararlo porque tenemos el mejor portero; el PP; y al mejor delantero, Juanma. Andalucía es mucho más de lo que pase hoy», sentenció.

Pablo Casado, Francisco de la Torre y Carolina España. Salvador Salas

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