La Casa de los Soles de Pizarra, un lugar para explorar la vida autónoma con diversidad funcional

Este proyecto, actualmente en fase piloto, cuenta con la colaboración de la Fundación La Caixa y los ayuntamientos de Álora y de Pizarra. «Queríamos contar con un espacio donde pudiéramos replicar la vida de una casa, como punto previo a la creación de un centro de inclusión social y laboral», cuenta Subires, y explica que el Ayuntamiento ya está rehabilitando una antigua escuela de la barriada de Cerralba en Pizarra en la que se ubicará esta casa. «Esperamos que sea una realidad en marzo».

Mientras finaliza esta reforma, las actividades se desarrollan en el albergue municipal de Cerralba, un espacio cedido de manera provisional que hace las veces de 'hogar'. «El proyecto comenzó en octubre, y desde entonces se han hecho muchos avances», explica la responsable de Imagina.

Las edades de los alumnos oscilan entre los 21 y los 56 años, ya que a partir de esa edad es cuando dejan de estar amparados por el sistema educativo, según señala Subires. «Hay muchos más recursos para los niños con diversidad funcional, a medida que se hacen mayores las familias necesitan más ayuda externa».

Todos ellos acuden 2 días a la semana al albergue para desarrollar actividades de convivencia, que también incluyen senderismo, gimnasia en parques y compras en los establecimientos locales.

Además, una vez al mes se organiza una 'fiesta de pijamas' en la que un grupo se queda a dormir en el albergue junto a varios voluntarios europeos, con el objetivo de fomentar su autonomía. «Les encanta, se sienten súper bien, porque además no están con sus monitores, si no con voluntarios, que son como amigos. Así pueden sentirse incluso más independientes».

De esta forma, el proyecto se desarrolla a través de tres ámbitos: la vida activa dentro de la casa, actividades saludables en el entorno y la inclusión laboral a través del 'Gallinero Social', una iniciativa puesta en marcha por la asociación en la que varios alumnos han sido contratados para gestionar el Aula de la Naturaleza Josefa Mancebo, en Cerralba.«Hay muchos servicios que los ayuntamientos necesitan contratar, como el mantenimiento de espacios públicos, y para ello cuentan con nuestros chicos y chicas», explica Subires.

La futura casa, un hogar «típico de pueblo» también contará con un huerto y un jardín para desarrollar actividades complementarias, siempre vinculadas a la convivencia y a la vida saludable. «Una vez que podamos instalarnos en la casa el objetivo es acudir todos los días y así poder desarrollar una formación más continua con todos los monitores y los usuarios».

Para 2022, otro de los retos es seguir fomentando los intercambios juveniles entre los usuarios de la asociación, ya que ahora se está incluyendo en este tipo de viajes a personas con diversidad funcional. «Varios chicos han viajado ya fuera de España en algunos de estos proyectos, y han regresado muy contentos, están animando a sus compañeros a probar esta aventura. Sus familias nos dicen que han notado un gran cambio en ellos».