Continúa la polémica sobre la construcción de una planta embotelladora en la Sierra de Camarolos. Este jueves, los alcaldes de la comarca de Antequera se han reunido junto a estas obras para unir fuerzas contra el proyecto y pedir su paralización. «Es un sinsentido», ... aseguró el alcalde de Villanueva del Rosario, Juan González, acompañado de los regidores de Villanueva del Trabuco (José María García), Colmenar (José Martín), Alfarnate (Juan Jesús Gallardo), Alfarnatejo (Daniel Benítez) y uno de los concejales de Casabermeja (Jaime Montiel).
Las obras de esta planta embotelladora se sitúan en el término municipal de Antequera, aunque sólo a un kilómetro de Villanueva del Rosario. Estas seis localidades se abastecen del acuífero en el que se obtendrán los recursos para este proyecto, por lo que se encuentran en «total desacuerdo» con esta planta ya que se trata de una comarca con carencias hídricas, según indicaron. «Nos sentimos totalmente desatendidos por las instituciones, porque no se nos garantiza un recurso tan esencial como es el agua».
En este sentido, el alcalde de Villanueva del Rosario aseguró que se tomarán medidas legales si no hay una «garantía extrema» de que los recursos hídricos de estos municipios no se van a ver mermados por este proyecto. «Estamos preparando alegaciones para pedir la suspensión cautelar de la obra, porque no queremos vernos en una situación en la que no podamos suministrar agua a nuestros vecinos mientras hay una empresa explotando nuestros acuíferos para el beneficio privado».
La empresa en cuestión, Inversiones Domago S.L., pretende extraer 6 litros por segundo, según aseguraron los regidores, que mantuvieron una reunión con la firma el pasado miércoles. «Nos transmitieron las cantidades que iban a exportar y la repercusión que podrán tener, pero no nos quedamos conformes y así se lo hicimos saber. Les hemos pedido más información, pero nada nos garantiza que nuestro suministro se vea mermado. Es la misma bolsa de agua».
Asimismo, hicieron referencia al comienzo de las obras, que se produjo durante la cuarentena. «Es una circunstancia peculiar que iniciaran el proyecto en pleno estado de alarma. A ninguno de nuestros ayuntamientos, que dependemos de estos acuíferos,se nos informó por vía oficial del comienzo de las obras».
También continúan en conversaciones con la plataforma ciudadana surgida contra esta obra. «Vamos todos a una, porque se ha tenido muy poca empatía con los habitantes de esta zona. No entendemos cómo tras pedir en numerosas ocasiones un trasvase desde el pantano de Iznájar para cubrir el déficit de agua se de cabida a iniciativas de este tipo, que vienen a explotar unos recursos ya de por sí limitados», explicaron.
Por su parte, el coordinador general del PP en Málaga, José Ramón Carmona, aseguró que la embotelladora creará hasta 100 empleos directos y no afectará «en ningún momento» al suministro de agua potable de los municipios del entorno.
Asimismo, la parlamentaria de Adelante Andalucía, Mari García Bueno, ha criticado el inicio de esta obra y pidió a la Junta que no privatice el agua de la zona. «Es una barbaridad que los vecinos y vecinas no tengan para beber y se privatice y embotelle el agua, y mientras las política del gobierno andaluz es ampliar regadíos sin tener en cuenta que el agua es finita».
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