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fernando torres
Sábado, 4 de marzo 2017, 00:45
El pacto entre PSOE y Ciudadanos en Mollina finalizó ayer por decisión del alcalde, el socialista Eugenio Sevillano. El regidor le comunicó a la única concejala de la formación naranja, Dolores Pinto, que le retiran el sueldo y que no tendrá derecho a un despacho en el Ayuntamiento. Sevillano justifica este dictamen, según explicó a este periódico, en la renuncia por parte de la edil a ocupar oficialmente la delegación de Asuntos Sociales: «Lo que no se puede hacer es estar cobrando 1.900 euros brutos sin ninguna responsabilidad». Tras la ruptura, «el PSOE seguirá gobernando en minoría».
Sevillano apuntó en declaraciones a Europa Press que el pasado día 15 de este mes le propusieron a Pinto ocupar el área de Asuntos Sociales, pero que ella lo rechazó «por escrito», siendo este el principal motivo para retirarle ese sueldo, que estaba percibiendo desde principios del mandato. Será el próximo lunes cuando la edil de Ciudadanos deba abandonar su despacho. Pinto, por su parte, aseguró ayer a SUR que sí estaba «trabajando en este área, solo que de manera extraoficial», ya que Ciudadanos no le permite ocupar este tipo de cargos si no son «cabezas de gobierno». Aun así, la edil explicó que esta situación «atípica» venía dándose desde 2015, año en el que comenzó la legislatura. «Esas eran las normas del juego, y ahora Sevillano las ha cambiado de golpe y porrazo», apuntó. «El alcalde no quiere una concejala que le lleve la contraria», aseveró la edil, que dijo creer que el reparto de alcaldías mediante el cual se pretendía oficializar su situación «ha sido hecho a propósito», para forzar su salida. «Deduzco que el motivo es porque no estoy de acuerdo con la política del PSOE».
Seguir «como hasta ahora»
En el escrito mediante el cual la concejala de Ciudadanos rechazaba la propuesta de asumir la delegación del área de Asuntos Sociales, al que ha tenido acceso SUR, la edil afirma que el ofrecimiento «no se ajusta a las condiciones del acuerdo establecido por el PSOE y Ciudadanos». Aprovecha también para recordarle al alcalde el «incumplimiento de los principios» del pacto de investidura desde el comienzo de la legislatura. De hecho, en la despedida, tras «no aceptar» la propuesta por segunda vez en el mismo documento, propone «seguir como hasta ahora».
Por su parte, el diputado de la comarca por el Partido Popular, Jacobo Florido, aseguró ayer a SUR que su formación «de momento no tiene intención de presentar ninguna moción de censura», ya que están centrados en las siguientes elecciones, donde pretenden ganar con «mayoría absoluta». Sin embargo, Florido sí manifestó su desacuerdo con la edil de Ciudadanos, «por no haberse aliado con la lista más votada» -en los comicios de 2015, PP y PSOE empataron en concejales, pero los populares obtuvieron 22 votos más-. Tras la ruptura del pacto, el diputado apuntó que «Pinto ha conocido de primera mano lo que es gobernar con el PSOE, y los socialistas han visto lo que es ser rehén de un solo concejal».
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