En Santa Rosalía, a espaldas del Parque Tecnológico, se encuentra la ETAP de Pilones. Madrazo

Málaga trabaja ya en su segunda desalobradora, gemela al Atabal, para dar agua al Guadalhorce

Estudio-7 redactó el pliego que servirá de base para el concurso para transformar la potabilizadora de Pilones en el nodo central del suministro en la provincia con hasta 3.000 litros por segundo de capacidad

Lunes, 29 de abril 2024, 00:24

Es una gran potabilizadora de agua ahora en desuso y tiene una capacidad de diseño para tratar 2.000 litros por segundo (1.500 pone en red la ciudad de Málaga). Los planes de la Junta de Andalucía y del Ayuntamiento pasan por modernizarla y ... convertirla en desalobradora, a imagen y semejanza del Atabal, una suerte de «gemela» en cuanto a funcionalidad, como explicaba hace unos días la concejala de Sostenibilidad, Penélope Gómez en el foro de SUR 'Cómo plantar cara a la sequía'.

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Y es que el Atabal y sus diferentes transformaciones permiten el tratamiento de aguas de peor calidad entrante y multiplican, por ejemplo, la posibilidad de utilizar pozos y otros recursos salobres, como los del pantano del Guadalhorce o los del Bajo Guadalhorce. Son un arma clave para sequía estructural en la provincia.

La ETAP de Pilones está situada junto al arroyo homónimo, en la zona de Santa Rosalía, en Campanillas, a espaldas del Parque Tecnológico de Andalucía y cerca de la central de ciclo combinado. Está junto al embalse del Tomillar o Pilones, que en realidad funciona como un gran depósito de 2 hm3. Este minipantano es una reserva estratégica porque podría dar de beber a Málaga capital durante 12 días en caso de avería o catástrofe.

La idea es que la ETAP de Pilones pueda suministrar agua al Guadalhorce y, en realidad, a casi cualquier punto de la provincia porque el mapa de recursos y la posibilidad de compartirlos se ha fortalecido gracias a la ampliación de la capacidad y bidireccionalidad de bombeos como los de Rojas (Churriana) y la Rosaleda. Conducciones y bombas permiten trazar una 'T' para intercambiar caudales entre Málaga, las dos costas y el Guadalhorce. De hecho, un primer municipio que estará conectado con Pilones es Alhaurín de la Torre, que recibe en estos momentos una inversión de la Consejería de Agricultura de más de 9 millones para enlazar con la red de Emasa.

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Una instalación con 31 años

Las instalaciones de tratamiento datan de 1993. Al principio, contaba con un pretratamiento sumado por un proceso de filtros de arena a presión. Sin embargo, la aparición con posterioridad de nuevos elementos contaminantes en el agua bruta, fundamentalmente pesticidas, planteó la necesidad de modificar el sistema. Así que en 2007 se hizo una obra de emergencia y se añadió ozono y carbón activo, además de sustituirse los filtros por decantadores. Pero sólo se actuó en una línea, así que ahora la capacidad de la planta es la mitad: 1.000 litros por segundo.

En síntesis, la planta se mantiene cerrada porque ahora no es capaz de dar la calidad requerida a un agua bruta entrante con altos niveles de cal y salinidad, además de materia orgánica y residuos. De hecho, en los estudios realizados en su día por Acuamed, figuraban valores altos de simazina (un herbicida), turbidez y coliformes, algo que será solucionado con los tratamientos de vanguardia previstos en la planta.

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Estudio-7 ha trabajado en el pliego para el proyecto

En 2010, el Gobierno, a través de Acuamed, diseñó un proyecto para modernizar la planta. Esa documentación es parte de la base utilizada por Emasa para preparar la salida a concurso de la nueva redacción del proyecto. Esta actualización ha tenido una fase preliminar, recién terminada, que fue adjudicada a la consultora Estudio-7 Soluciones Integrales el pasado otoño por un importe de 68.836 euros. La idea, además de incorporar tecnologías para tratar aguas salobres, es subir la capacidad a 3.000 litros por segundo.

El embalse del Tomillar o de Pilones está justo al lado de la futura desalobradora. Madrazo

Para llevar a cabo la transformación de lo que también podría ser el nodo central de la distribución del agua en la provincia, la Junta y el Ayuntamiento firmaron un convenio en septiembre del año pasado. Emasa se encargaría del proyecto y la gestión, explotación y mantenimiento y el Gobierno andaluz, de las obras.

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Conexión Pilones-Atabal

En los últimos meses, han concluido también otras obras clave en todo este entramado para abastecer a Málaga y el área metropolitana: la conexión con el Atabal enlazando a su vez con el tubo que viene desde el azud de Aljaima. Por lo tanto, Pilones puede recibir y mandar agua de todos los pantanos del sistema Guadalhorce, incluido Casasola. Estas obras han sido ejecutadas por Construcciones Garrucho por un importe de 1 millón de euros en términos redondos. De este modo, se conseguirá un caudal de entrada continuo al Atabal de 440 litros por segundo, lo que permite eliminar las fluctuaciones que sufre el suministro actual desde el canal principal.

Las instalaciones está previsto que den servicio de manera directa a Málaga, Alhaurín el Grande, Alhaurín de la Torre, Cártama, Pizarra, Álora y Coín, lo que se encuadra en el salto metropolitano que está dando Emasa, con hasta ocho actuaciones para prestar servicios de agua en cualquiera de las fases del ciclo integral a otros municipios.

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El Guadalhorce no bebe agua de pantano

Salvo en el caso de Málaga, el resto de los municipios se abastecen de pozos del acuífero del bajo Guadalhorce. La posibilidad de surtirse desde los embalses del Guadalhorce permitiría disponer de una mayor garantía de suministro para estos pueblos. El objeto por tanto es sentar las bases para la construcción de una planta capaz de abastecer a los municipios del valle del Guadalhorce, planta a la que llegará un agua bruta de calidad similar a la que actualmente llega a la ETAP de Atabal.

Entre las cuestiones en las que trabaja Emasa, se encuentran estudios de laboratorio para definir las opciones tecnológicas a aplicar en esta 'gemela' de El Atabal, con sistema de ósmosis inversa en sus membranas, que, además, se pretende que entre en servicio por fases. Y es que la gran variabilidad de la calidad del agua que llega a Pilones es uno de los condicionantes clave. Es más, la idea es aplicar sistemas de 'puenteo' para ir abriendo o cerrando fases de tratamiento según los recursos entrantes que incluso llegan a procesos de «ultrafiltración». En otras palabras: será una estación modular.

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