Bajas emisiones en Málaga: 26.000 coches diarios menos y 11 millones en multas al año

Un primer gran dato es que la aplicación a corto plazo de la ZBE (cuando ya haya sanciones) pretende sacar del área central de la ciudad a más de 26.000 vehículos, que son los que no tendrían autorización en las primeras fases para acceder por los puntos de entrada controlados por cámaras lectoras de matrículas conectadas a la base de datos de la DGT. A largo plazo, 15 años, se estima que se eliminarían unos 40.000 vehículos diarios de las calles, un 20%.

En Málaga, como en la gran mayoría de municipios, la normativa es más exigente con los vehículos de fuera. ¿Y de dónde vienen los que circulan por esta futura ZBE ahora? Según el documento, el 75,5% es tráfico interno y el 24,5 viene de fuera. De este último, el 11% accede desde Torremolinos y Costa del Sol; el 5%, desde los Alhaurines; el 4,5%, desde la Axarquía y Rincón de la Victoria; el 2% llega desde Las Pedrizas, y el 1,8, desde Cártama y A-357.

El peso de la Gran Málaga en la movilidad de la ciudad es indudable. Según los datos, 206.500 vehículos motorizados entran a diario a las futuras calles acotadas, por lo que los de otras localidades superarían los 50.000 diarios.

Los puntos de control a la ZBE con mayor tráfico serían el Paseo Antonio Machado-Avenida Ingeniero José María Garnica, Bailén-Trinidad y Avenida de Andalucía-Jardines Picasso (21.000 coches diarios). Muy de cerca (20.000) les sigue el Paseo Pablo Ruiz Picasso con Rafael Pérez Estrada.

La superficie central que ocupa este área supera los 404 campos de fútbol y en este espacio residen casi 73.500 vecinos. Acapara el 26% de los viajes motorizados de toda la ciudad.

¿Cómo es el parque móvil que ahora circula por estas calles? La etiqueta mayoritaria es la C (40,4%), seguida, con un 31,1%, por la B, el distintivo en el que puede empezar a haber problemas. Casi uno de cada 4 coches carece de etiqueta. Y los limpios, ECO y 0, sólo suponen el 3% y menos del 1% respectivamente. El caso de los B está pensado para que las familias agoten la vida útil de sus vehículos. Por eso, si pagan la tasa en Málaga, pueden circular sin horizonte de tiempo. Pero, si venden, el vehículo pierde el acceso.

Y es que el Área de Movilidad ha aprovechado las moratorias de 2023 y 24 para afinar y ensayar cómo funcionará esta nueva realidad que viene a suponer un cambio muy profundo en los paradigmas actuales, si bien en Málaga existen desde hace años experiencias con zonas restringidas al tráfico (la última, el eje Álamos-Carretería).

Uno de los estudios profundos que se ha realizado atañe a la contaminación tanto en emisión de gases como de ruidos. El último trabajo de campo tuvo lugar en los cuatro primeros meses de este año. Los valores de dióxido de nitrógeno están dentro de los fijados. Sí, en cambio, se registran superaciones de las partículas PM10, tanto de los umbrales diarios como de los anuales. Eso ocurre en dos medidores: Caleta-Pablo Ruiz Picasso y Calle Pacífico. En cuanto a las PM 2,5, todo en orden. Son datos que se irán monitorizando y actualizando con frecuencia para comprobar objetivos.

El propósito es el de reducir en 2030 el dióxido de carbono en un 13,3%; el monóxido de carbono un 16,4; el dióxido de nitrógeno un 19,2%, y las PMA, un 20,5.

Los indicadores de ruido superan los niveles de 65 dB de forma holgada y arrojan cifras globales (mañana, tarde, noche) de entre 69 y 75 dB. Los resultados se encuentran en el rango de los diferentes mapas de ruido y acciones tomadas por el Área de Medio Ambiente en este sentido.

Hay 26.281 vehículos los que no cumplen con las condiciones para acceder a la ZBE. De ellos, el 70% son turismos, el 11% son ciclomotores y el 10%, motos.

En todo caso, lo más importante es seguir las señales: se han instalado 13 paneles de mensaje variable, que serán reforzados con otros 16 y, por supuesto, señales verticales.

La implantación de la ZBE ha supuesto una inversión de 4,2 millones de euros (el Ayuntamiento aporta 516.000). Para esta y otras políticas de movilidad, el Plan de Recuperación y Resiliencia inyectó a través del Gobierno central más de 10 millones de euros en las arcas municipales.

Se estima que los gastos para gestionar todo este nuevo sistema ascenderán a 100.000 euros anuales. La modernización progresiva del parque móvil también augura una caída anual de 1,38 millones de euros en el Impuesto de Vehículos de Tracción Mecánica (IVTM). Lo mismo ocurrirá con la zona azul (SARE): bajará un 5% en un primer momento (146.000 euros al año).

¿Y cuánto se va a ingresar por multas? Los estudios calculan 263 multas diarias partiendo de un porcentaje de infractores del 1%. La sanción es de 200 euros (100 por pronto pago) y el informe muncipal pondera y determina 38.900 euros diarios, 11,6 millones de euros al año, por sanciones.

Se ha analizado todo, hasta el número medio de viajeros por vehículo. Son 1,55, el dato más alto de estudios similares en España, donde la media de ocupantes es de 1,3.

También se ha medido un aumento de 505.000 euros de ingresos en el transporte público por personas que de entrada abandonan el vehículo privado y van a la EMT. Puede haber una transferencia inicial de un 1,5% de personas que se pasen al transporte público.

Con todos estos parámetros, el balance positivo para las cuentas municipales supera los 10,5 millones de euros.

Durante el primer año (otoño 24-otoño 25) podrán circular por la ZBE todos los vehículos. La cosa da un paso más al siguiente año, cuando se restringe el acceso a los que no tengan etiqueta y estén dados de alta fuera de Málaga capital. Y a partir del año tercero no podrán acceder los B y sin etiqueta de otros municipios (y ojo, los B que hayan sido vendidos, como se ha dicho).

Por lo tanto los Cero, Eco y C siempre pueden en los primeros años, sean de donde sean. Y los de Málaga, también.

También se facultará a circular por la ZBE al transporte colectivo regular de viajeros; taxi y VTC; vehículos históricos, y camiones.

Las furgonetas, podrán circular libremente durante los cuatro primeros años las Cero, Eco, C, B y sin etiqueta ambiental. A partir del quinto año podrán circular las furgonetas domiciliadas en Málaga y estarán vetadas las que vengan de fuera y carezcan de sello.

Los vehículos sanitarios, policiales y demás no tendrán problemas.

La implantación de la ZBE ha durado un año y ha sido sometida a doble proceso de consulta. Su delimitación es: Paseo Marítimo Antonio Machado, avenida Ingeniero José María Garnica, calle Explanada de la Estación, Plaza de la Solidaridad, avenida de las Américas, avenida de la Aurora, Jardines de Picasso, avenida de Andalucía, calle Compositor Lehmberg Ruiz, calle Hilera, calle Santa Elena, calle Honduras, calle Arango, calle Martínez Maldonado, avenida de Barcelona, Plaza del Hospital Civil, avenida Doctor Gálvez Ginachero, calle Mazarredo, avenida del Arroyo de los Ángeles, Paseo de Martiricos, calle Huerto de los Claveles, calle Marqués de Cádiz, calle Juan del Encina, calle Empecinado, Plaza Capuchinos, Alameda de Capuchinos, Plaza Olletas, calle Toquero, calle Obispo González García, calle Amargura, calle Ferrándiz, Paseo Salvador Rueda, calle Rafael Pérez Estrada y Paseo Marítimo Pablo Ruiz Picasso.