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Íñigo Méndez de Vigo, en el bar Hermanos Rodríguez, junto a los dueños Pepa y Manuel Rodríguez, y los políticos Carolina España, Juanma Moreno y Elías Bendodo.
El ministro de Cultura se engancha a las albóndigas de Dani Rovira

El ministro de Cultura se engancha a las albóndigas de Dani Rovira

íñigo Méndez de Vigo repite visita en el bar Hermanos Rodríguez del barrio de la Paz tras recomendárselo el actor malagueño en la gala de los Goya

Ester Requena

Lunes, 12 de diciembre 2016, 16:48

"¿Qué le echa usted a las albóndigas para que estén así de buenas?". A sus 64 años, Pepa Rodríguez está acostumbrada a que le pregunten siempre el secreto de su plato estrella... pero que lo haga nada menos que el ministro de Educación, Cultura y Deporte, Íñigo Méndez de Vigo, no ocurre todos los días. O sí. Porque el actual portavoz del Gobierno ha repetido visita en el Bar Hermanos Rodríguez en pleno barrio de la Paz. Y, por supuesto, volvió a pedir albóndigas, tanto en salsa de almendras como de tomate.

El también portavoz del Gobierno esta vez avisó de su visita al actual dueño e hijo de Pepa, Manuel. Había reservado previamente una mesa para celebrar la inauguración oficial del Museo de Málaga en el Palacio de la Aduana junto a parte de la cúpula del Partido Popular en la ciudad. A la mesa se sentaron el presidente de la Diputación Provincial, Elías Bendodo; el presidente del PP Andaluz, Juanma Moreno; el delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz; el subdelegado del Gobierno en Málaga, Miguel Briones, o la diputada nacional Carolina España, entre otros, en un establecimiento donde el menú del día sale a 8 euros.

El ministro ya se ha hecho seguidor de un plato que le recomendó Dani Rovira durante la gala de los últimos premios Goya. Sólo unos meses después, el político se acercó a probarlas en cuanto tuvo ocasión, aunque por sopresa. Y le han gustado porque ha vuelto a repetir ¡y tanto de tomate como en salsa de almendras!

Pero, ¿cuál es el secreto de estas albóndigas de cine? «Una buena materia prima, con aceite de oliva virgen puro, mucho huevo... y mucho cariño», desvela Pepa. Prepararlas conlleva largas horas de dedicación: el día antes las deja con el aliño para que cojan más sabor. Y ella se ayuda de la Thermomix para la salsa de almendras.

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