Tatuajes, músculos y piercings así es Joel Bosqued, el nuevo novio de Blanca Suárez

"¿Qué hay que hacer para que te miren así?". La pregunta se la hacía el otro día el actor Joel Bosqued comentando una fotografía de Brad Pitt y Angelina Jolie. Quizás sea una técnica para despistar a los paparazzi que le siguen por todos los rincones ahora que ha saltado con fuerza al papel couché de la mano de la mismísima Blanca Suárez, su nueva conquista... por más que él luego pida la fórmula secreta del amor.

Ellos ni confirman ni desmienten un noviazgo que ya pasaría de dos meses. Sus cariñosos paseos, así como las entradas y salidas de la casa de la ahora Isabel de Portugal en Carlos, rey emperador habrían dejado claro que la actriz de moda vuelve a tener ocupado su corazón. Aunque en esta ocasión el nombre no es tan mediático como los de Miguel Ángel Silvestre, Dani Martín o Dani Martínez.

¿Pero quién es Joel Bosqued, aparte de un zaragozano de ojos azules? El trabajo ha unido a estos jóvenes artistas. O más bien su representante, ya que ambos se encuentran en el catálogo de la agencia Paloma Juanes. Eso sí, Joel desde hace relativamente poco. De la misma edad, 26 años, comparten aficiones más allá del mundo de la interpretación, en el que los dos debutaron siendo niños. Si la trayectoria de la chica Almodóvar es de sobra conocida, la de su chico ha pasado un poco más desapercibida. Joel comenzó a despuntar tras su papel en la miniserie El castigo, de Antena 3. Luego pasaría a La pecera de Eva dando vida al tartamudo Nacho e incluso a interpretar al malísimo Sebastián El Cantinero de Tierra de Lobos, o Sánchez en Víctor Ros.

Ahora triunfa al otro lado del charco con la serie adolescente Yo quisiera, que en breve llegará a Divinity. A este lado se dejará ver en algunos capítulos de Rabia. Su currículo sentimental también va bien servido: ha sido novio de las actrices Ana Rujas y Andrea Duro, con quien llegó a compartir tres años de amor e incluso posados en la alfombra de los Premios Goya.

A tanto no llega por el momento con Blanca Suárez, con quien solo le han pillado de copas por la noche madrileña, en la fiesta de cumpleaños de su representante o saliendo con las maletas de su casa tras pasar, supuestamente, la noche juntos. La emperatriz sigue asegurando que el verdadero hombre de su vida no tiene apellidos: solo el nombre de Pistacho, el teckel regalo de su ex Miguel Ángel Silvestre. Al pequeño can se le sumarán ahora hermanitos, ya que Joel atesora dos dobermans y un galgo abandonado. Con esta familia numerosa no sería extraño verlos pronto de viaje al sur para surfear con sus neoprenos en la costa gaditana, deporte que les apasiona.

A él también le tira el kick boxing, el skate, el fútbol y la equitación. De hecho, le encanta subir a sus redes sociales fotos montando a caballo, lo que compagina ayudando en sesiones de equinoterapia a su amigo Guille, «la persona más especial que conozco». Hace unos meses incluso lo raptó para sorprenderlo llevándoselo a la plaza de toros de Las Ventas: allí disfrutaron con las mejores piruetas de moto en el Campeonato Mundial Red Bull X-Fighters.

Sobre la pasarela

Al aragonés le tira también la moda. Un requisito casi imprescindible cuando se sale con toda una it girl. Pero Joel no se conforma con el front row ni con los reportajes en los que luce su buena percha. En julio incluso se subió a la pasarela de la Madrid Fashion Show Men de la mano de García Madrid para presentar su colección primavera-verano 2016, en la que el actor figura como imagen de la campaña publicitaria.

Su vestuario deja claro que sigue las tendencias y que le encantan los cambios de imagen. Hasta ha lucido el pelo color rubio platino y no por exigencias del guión. Sin olvidar sus queridos piercings. Si Blanca los luce en orejas, labio, ombligo, frenillos varios, el del séptum... él no se queda atrás en sus orejas. Eso sí, le gana a su compañera por goleada en tatuajes: una decena por todo el cuerpo. No falta su signo del zodíaco libra, una frase en árabe en sus costillas (Mejor volver atrás, que perderse en el camino) o el número 28 en cifras romanas.

Tremendamente familiar, Joel siente especial predilección por su hermana pequeña, María, a la que piropea siempre que tiene ocasión. Con ella, una estudiante de Filología Clásica en la Universidad Complutense, hizo su última escapada a Berlín... tras sorprenderla mientras estaba en plena clase. Detalles que seguro que han ablandado a Blanca Suárez. ¿Será Joel Bosqued su emperador definitivo?