27 Festival de Málaga: 'Aquellos maravillosos días', la historia de una abuela, una madre y una hija que atrapó a Martin Scorsese

Unidas en una circunstancia trágica, abuela, madre e hija se ven obligadas a conocerse y a aprender a convivir en una pequeña granja rural de gallinas. ¿Qué harías si de repente tienes que dejar tu vida en Los Ángeles y volver a tu casa en un pueblo de Francia para cuidar de tu madre? Es la primera pregunta que se hicieron los directores tras una situación familiar. «Yo soy de un pueblo de Normandía donde hay 500 personas y 5000 vacas», explica anecdóticamente Marco La Via sobre el deseo que tenía de marcharse para poder estudiar y la puesta en jaque que sería esta situación.

La Via y Ladoul querían representar la imagen de tres mujeres fuertes e independientes, a pesar del parentesco, cada una con su manera de pensar y de hacer las cosas, que no se llevan bien porque realmente no se conocen. «Estamos acostumbrados a ver personajes que están equivocados o que llevan la razón, y nosotros queríamos demostrar que cada una lleva su razón una vez las conoces», expresa Marco La Via.

Como directores han decidido no ponerse de parte de ninguna generación y dejar que cada una brille por lo que es, poniendo en valor sus personalidades frente a los problemas. Morgan Saylor dará vida al personaje de Charlie, una universitaria de 20 años que regresa a la finca familiar para ayudar a su madre enferma. La joven estudia finanzas mientras que su progenitora Laura, interpretada por Andrea Riseborough, regenta una granja de gallinas. Y tras una larga ausencia, la actriz Catherine Deneuve aparecerá en escena bajo la figura de Solange, una francesa feminista y excéntrica que decidió marcharse a América para conocer mundo.

En el reparto de esta película, Hanna Ladoul y Marco La Via se reencuentran con Morgan Saylor, con la cual ya habían tenido el placer de trabajar en 'We the Coyotes': «Ha sido fantástico ya que tenemos mucha confianza y hay mucha química a la hora de trabajar », cuenta Ladoul. «A veces es un poco raro cuando grabas una película y tienes que rodar o incluso convivir durante varias semanas con un grupo de personas que apenas se conocen », sentencia.

«Lo más difícil ha sido representar las cuatro estaciones del año en el mes de octubre en Bélgica», expresa la directora. No obstante, la actriz estadounidense se queda con «lo divertido que ha sido poder rodar todo en una misma localización, llena de animales y con la compañía de un gato».