'Alguien que cuide de mí' termina -y no es 'spoiler'- con esta frase: «El tercer acto es importante». Una expresión que da sentido a la trama película, pero que también cobra mucho significado fuera de ella. El Festival de Málaga inaugura su vigésimo sexta ... edición con el debut en la dirección de Elvira Lindo junto con Daniela Fejerman, ambas también guionista de este filme amable y tierno, incluso cuando se aborda un drama. «Me parece una buena coquetería ser debutante a mi edad, quiere decir que se puede hacer todo a cualquier edad», reivindicó Elvira Lindo, de 61 años, unas palabras que fueron muy aplaudidas en la primera rueda de prensa del certamen.
La escritora, guionista y ahora también directora aclaró que no lo dice solo por el hecho de ser mujer, sino porque hay «cierto edadismo» que hace parecer que no se puedan emprender proyectos nuevos pasada una edad. Pero sí, «se pueden hacer nuevas amistades y tener una vida nueva». Ahora bien, ella -puntualizó- solo está «en el segundo acto todavía». Tras años implicada en la producción de las películas siendo la guionista, le ha llegado la hora de dar el paso detrás de cámara.
Tampoco esta es la primera inauguración en Málaga para Elvira Lindo: hace 26 años, una película que ella había escrito estrenaba el palmarés de un recién nacido Festival de Málaga, 'La primera noche de mi vida', de Miguel Albadalejo. Aquella vez, recordó, sorprendió que ella asistiera a la rueda de prensa junto al director. Hoy acapara el protagonismo por derecho propio.
'Alguien que cuide de mí', inspirado en un relato de Elvira Lindo, abre el certamen, fuera de concurso, con la historia de tres generaciones de mujeres (madre, hija y nieta) dedicadas al mundo de la interpretación, tres actrices a las que dan alma Magüi Mira, Emma Suárez y Aura Garrido. «Trata nuestra profesión desde un lugar de realidad, como lo que es, un trabajo más», celebró Aura Garrido. Porque aparece el éxito de la más joven de la familia, que acaba de recibir un Goya, pero también el fracaso de quien siente que «ha pasado de moda» en la industria (Suárez) y las emociones de quien se resiste a abandonar su papel de diva de la escena (Mira). «Cada personaje representa un estadio distinto por el que todos los actores vamos a pasar o hemos pasado en nuestra carrera», aportó Víctor Clavijo.
Él es uno de los dos actores que acompañan en su desarrollo a estas tres mujeres. El otro es Pedro Mari Sánchez, el ya mítico Chencho de 'La gran familia' y actor con una prolífica carrera en las tablas. Él es el apoyo de Cecilia, el rol de Emma Suárez, una mujer aparentemente fuerte que camufla con el sentido del humor una gran fragilidad. «Ha sido un regalo trabajar a su lado y tener esa relación tan bonita, que se necesitan y se reclaman, con un amor ante los demás imposible que solo ellos dos que viven esa relación lo entienden», declaró Emma Suárez.
Pese a la ternura de los personajes y el tono amable, 'Alguien que cuide de mí' habla del «desamparo ante la adversidad» -dice Lindo- y de lo importante que es «aprender a cuidar a los demás» -añade Fejerman-, incluso en las relaciones familiares «donde los cuidados se dan por sentados». Por el camino, se tocan asuntos como la vanidad, el paso del tiempo, la lucha de egos y hasta el estigma del sida.