La Feria de Málaga moviliza a más de 4.000 trabajadores de la hostelería para cubrir las casetas del Real

Una cifra elevada que se explica por dos motivos. Por un lado, como ya se demostró el año pasado, el Real Cortijo de Torres está ganando peso en la feria. Una dinámica que, según los empresarios del sector consultados, se acentuará en esta edición. Y, como es lógico, un Real que va creciendo en todos los sentidos también genera más demanda de más personal para atender un mayor flujo de visitantes.

Con las casetas funcionando en el Real desde primera hora de la tarde, los empresarios que montan una caseta se ven obligados a duplicar el personal para poder hacer turnos. Así, el trabajo se distribuye en dos franjas de ocho horas, el tiempo máximo que puede trabajar un empleado según la normativa laboral.

El presidente de Mahos, Javier Frutos, destaca a la semana de feria como un motor importante para el sector y se congratula de que el «tirón que tiene ahora el Real tiene mucho que ver con la apuesta de copiar lo que ya funcionaba en el Centro».

«La hostelería en el Real se ha profesionalizado mucho y eso también se nota en la contratación», insiste. Frutos corrobora las cifras ofrecidas anteriormente y las enmarca, además, en un año récord de contratación para la hostelería.

«Es algo que siempre se dice, pero, una vez más, los números confirman que somos el motor de la economía de la provincia, junto al turismo», sentencia. El presidente de Mahos considera, además, que los tiempos en los que regía la economía sumergida y se trampeaban los días con jornadas eternas de sol a sombra pertenecen al pasado. «Los tiempos han cambiado mucho para el bien de todos», remarca.

Juan Rambla preside Andalucía de Noche, la asociación que aglutina a los empresarios de discotecas, y tiene un amplio bagaje montando casetas de ocio nocturno en el Real. Rambla admite que los caseteros han tenido dificultades para encontrar trabajadores, pero que, salvando alguna puntualidad, todos han logrado cerrar sus plantillas.

El empresario destaca, además, que todos los trabajadores son remunerados según el convenio provincial de hostelería. En este sentido, Rambla se defiende de las voces que argumentan que las malas condiciones laborales que se ofrecen por parte de los hosteleros sea el motivo para no encontrar a personal suficiente. «Ves los números del paro y luego ves el trabajo que te cuesta encontrar a gente y hay algo que no cuadra», destaca Rambla. «En la hostelería, el sueldo más ronda los 1.300 euros según el convenio. Luego hay otros empleos en los que se paga mucho menos, pero luego siempre se repite que el trabajo basura está en la hostelería», lamenta.

Una realidad distinta dibujan los sindicatos. Más que una oportunidad, por parte de CCOO se denuncia que las condiciones laborales que se ofrecen en el Real distan mucho de las que se proclaman por parte de los empresarios del sector. «La teoría está muy bien y es verdad que el convenio de hostelería es bueno, el problema es que no se cumple», asegura a SUR la secretaria general para el sector servicios, Lola Villalba. Es más, asegura que el Real «es la selva» en cuanto a al cumplimiento de los derechos laborales.

Villalalba también duda de que se haya profesionalizado el trabajo que se ofrece en el Real. «Quien quiere trabajar en la hostelería, en la provincia de Málaga lo puede hacer desde el principio de marzo. En el Real abunda la mano de obra no cualificada», resalta la secretaria general del sector servicios de CCOO y pide «mejores condiciones».