Secciones
Servicios
Destacamos
¿Qué buscan las empresas en los aspirantes a trabajar con ellas? ¿Cuáles son esas competencias y aptitudes que los deben diferenciar del resto para hacerse con el puesto? A estas cuestiones trata de responder el Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE) en el último ... estudio realizado por su Observatorio de las Ocupaciones. ¿Objetivo? Lograr la máxima empleabilidad ajustando lo más posible la oferta y la demanda. Para ello, han definido las características de los puestos de trabajo y las condiciones laborales, de forma que los usuarios tengan la máxima información para contrastarla con su propio perfil y puedan así corregir lo necesario para adaptarlo a lo que piden. Igualmente, buscan dar a conocer nuevas competencias laborales y la formación que requieren para que el candidato esté al tanto si desea acceder a un puesto determinado.
Bajo el título 'Los perfiles de la oferta de empleo', este informe se ha realizado a partir de la información recabada en las 2.283 ofertas publicadas en Internet durante 2020 directamente por la propia empresa o indirectamente a través de los servicios públicos de empleo, las empresas de trabajo temporal, agencias de colocación o web especializadas en empleo.
A partir de ahí, el SEPE ha concluido que hay 17 perfiles profesionales (consulta todos aquí), «que tienen un considerable potencial de empleo y buenas perspectivas laborales». En todos ellos detalla qué implica ese oficio y lo que principalmente requieren las empresas. Los directores financieros ocupan el primer puesto en la lista. El 84 % de los contratos formalizados con estos profesionales son indefinidos y los temporales suelen firmarse bajo la modalidad de 'eventuales por circunstancias de la producción' (8 %) seguidos de los de 'obra o servicio' (4 %).
Asegura el SEPE que lo que más valoran son los conocimientos específicos en mercados financieros, la fiscalidad de empresas, el manejo de determinados programas informáticos, pero también buscan un candidato con «habilidad analítica, capacidad resolutiva y visión estratégica».
Le siguen los técnicos educadores de educación especial. La comunidad autónoma que aglutina el mayor número de contratos es Andalucía, con el 28 % del total de los contratos firmados para esta ocupación. Le sigue País Vasco, con el 25 % y Cataluña, con el 23 %. A estos profesionales les requieren una labor de apoyo y acompañamiento para facilitar la socialización. De ahí que busquen que tengan un alto grado de empatía y ética, con habilidades sociales y comunicativas.
A continuación, le seguirían los profesionales de la protección ambiental, muy demandados, pero a los que se exige una buena formación en la legislación vigente sobre emisiones atmosféricas, gestión de residuos, reciclaje, rastro de carbono y eficiencia energética. Tienen una alta empleabilidad (86%) y la edad de casi la mitad de los contratados oscila entre los 25 y 34 años.
En cuanto a los ingenieros en construcción y obra civil, que ocuparían el cuarto puesto, las competencias que les requieren se contemplan en sus planes de estudios universitarios, «siendo importante la inspección y verificación del cumplimiento de procedimientos, así como la implantación y seguimiento de las medidas preventivas de la seguridad y salud, en consonancia con la normativa vigente en las obras de construcción», detalla el estudio. Asimismo, considera clave en estos profesionales dominar programas, como el Staad pro y Cype, así como conocimientos avanzados en ofimática (Autocad, BIM, Presto y Proyect). Quieren profesionales que sean competentes en planificación, que tengan iniciativa, también mano izquierda para trabajo en equipo y sean hábiles para la negociación. De las ofertas que ahondan en las condiciones de la jornada laboral, la mayoría ofrece trabajo a tiempo completo y en 8 de cada 10 ofertas que piden un idioma, exigen un alto nivel de inglés. En menor medida, se pide conocimiento del francés y del alemán.
El quinto lugar es para los ingenieros técnicos industriales y de producción. En estos casos precisan trabajadores con un alto conocimiento de cálculo de estructuras metálicas (Cypecad, Tekla) y gestión de licitaciones. «La experiencia de dos o más años en puestos similares es muy destacada, al igual que la actitud ante el trabajo, insistiendo en la gestión de conflictos y toma de decisiones», recoge el SEPE.
En las ofertas, la aptitud -en sentido estrictamente laboral y como el conjunto de condiciones que hacen a un profesional idóneo para desempeñar una función determinada- es condición recurrente. Y es que además de «conocer la profesión», la mayoría de las empresas requieren un plus que aporte algo más al desempeño de un determinado puesto de trabajo. «Más que disponer de las capacidades necesarias para hacer unas determinadas tareas, las compañías valoran considerablemente la actitud con la que los empleados afrontan su trabajo», concluye el SEPE. En este sentido, fomentar valores como la superación, el optimismo, la perseverancia o la motivación resultan clave para colaborar en que el negocio crezca. «Estas actitudes se han convertido en un requisito transversal en la mayoría de las ocupaciones».
Junto a un alto nivel de inglés y una mayor disposición a la movilidad geográfica, el estudio llama la atención sobre un requisito cada vez más común de las empresas: poseer experiencia previa, bien genérica o específica, en función de la orientación concreta que tenga el puesto ofertado. «Al tratarse de un requisito clave a la hora de entrar en el mercado de trabajo y teniendo en cuenta que muchos desempleados no la pueden acreditar, se hace necesario buscar alternativas y establecer puentes en el recorrido: formación-prácticas-trabajo», subraya el SEPE.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.