Una nueva oportunidad

Pese a los aspectos negativos con los que se inicia el año, como la elevada tasa de desempleo, el descenso en la demanda privada o la incertidumbre entre los inversores, la OCDE pronostica que el PIB crecerá un 5% en 2021.

Un aspecto primordial en estas previsiones lo constituye el plan de recuperación europeo con los fondos Next Generation, aunque su llegada a través de la aprobación de los proyectos presentados encarna una incógnita. Habrá que observar si estos proyectos resuelven las necesidades estructurales del país y cumplen con los ODS mediante una planificación sostenible que permita la creación de infraestructuras eficientes.

La conservación y construcción de infraestructuras constituyen motores de la economía por su capacidad tractora. Éste último, como recoge la patronal ANCI, es el sector que genera una mayor actividad económica inducida, con 1,92 euros por cada euro invertido.

Las ciudades como Málaga, en constante crecimiento, demandan nuevas infraestructuras, la actualización de las existentes y su mantenimiento en el tiempo. Intervenciones hidráulicas para resolver carencias históricas, el tren litoral, la continuación del metro, el vial perimetral del área metropolitana o el tercer hospital son solo algunos ejemplos de proyectos pendientes.

La aprobación de los Presupuestos Generales del Estado, así como los autonómicos en Andalucía, contribuirá a que se puedan licitar infraestructuras e impulsar la recuperación deseada.