Los precios en abril: bajan la energía y los carburantes, pero sube la cesta de la compra

La escalada incesante de los precios da en abril un pequeño respiro a los bolsillos de millones de familias y empresas. Porque la inflación sigue en niveles preocupantes, con un incremento anual del 8,4%, pero al menos ese porcentaje deja una caída de casi un punto y medio respecto a las cifras de marzo, cuando estaba en el 9,8%. Esa leve bajada se debe a la contención en los precios de la energía, siempre en comparación con el mes anterior, sobre todo en lo referente a la electricidad y los carburantes; sin embargo, la cesta de la compra es ahora todavía más cara que hace un mes.

Son algunas de las primeras conclusiones que deja el avance del mes de abril del Índice de Precios al Consumo (IPC), publicado este jueves por el Instituto Nacional de Estadística (INE) y relativo al conjunto del país. El informe prevé esa caída mensual desde el 9,8 hasta el 8,4% y, de confirmarse, la justifica en la evolución de los precios de la energía y de los carburantes. Ese descenso vendría motivado por las medidas emprendidas por el Gobierno en las últimas semanas para detener la incesante subida de precios en estos sectores.

Del otro lado, ir a la compra es ahora más caro que hace un mes para todos los españoles. Lo confirma la inflación subyacente, aquella que se calcula eliminando del cálculo los precios de los alimentos no elaborados y de los productos energéticos. Esa tasa sube un punto en abril respecto al mes anterior, hasta el 4,4% y se centra en los precios de los alimentos y de las bebidas no alcohólicas. La cifra representa, además, el porcentaje más alto desde hace casi 27 años; en concreto, desde diciembre de 1995.

Los datos publicados este jueves se refieren al conjunto del país, ya que los niveles por provincias se publicarán la próxima semana. Se verá entonces cuál es la evolución de los precios en Málaga, que en marzo superaban un alza de los dígitos hasta situarse en el 10,1%, por encima del 9,8% nacional. Los datos de entonces detallaban que la cesta de la compra era en Málaga un 7,8% más cara que hace un año, mientras que en el resto del país esa subida quedaba en el 6,8%.

Con la invasión rusa en Ucrania como telón de fondo del encarecimiento de los combustibles, los precios relacionados con el uso de los vehículos personales subían en marzo un 26,2% en Málaga, también por encima del 25,4% del promedio nacional. Los alimentos (con una subida anual del 7,9% frente al 6,9% nacional), el calzado, el mobiliario y los aparatos domésticos y la enseñanza secundaria y superior también eran más caros en Málaga que en el resto del país.

Desde la Confederación de Empresarios de Málaga (CEM), su vicepresidenta ejecutiva y secretaria general, Natalia Sánchez ofrece una primera valoración del IPC adelantado de abril: «Aun a la espera de que se publique el dato definitivo, que tendrá que confirmar las cifras publicadas, el descenso del IPC en el mes de abril podría suponer un punto de inflexión en la evolución de la inflación«.

«Para ello es preciso que, junto a las ya puestas en marcha, se articulen nuevas actuaciones que permitan las bajadas de los precios de combustibles, materias primas y energía. Sólo así empezaremos a apreciar efectos favorables sobre la economía de familias y empresas», sostiene la representante de los empresarios malagueños.

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