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Las nuevas tarifas de la luz por franjas horarias traen de cabeza a los consumidores. Ahora, poner la lavadora o el lavavajillas en horario punta (de 10.00 a 14.00 horas y desde las 18.00 hasta las 22.00 horas, de lunes a ... viernes) puede salir muy caro. Por eso, evitar esas horquillas horarias conllevan un ahorro que, según la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), puede llegar a los 500 euros al año para un usuario medio.
Según las curvas de consumo elaboradas por el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), dependiente del Ministerio de Transición Ecológica, por lo general en las casas españolas el lavavajillas se suele poner de 14.00 a 16.00 y, sobre todo, de 21.00 a 23.00, después de cenar. En cuanto a la lavadora, lo más habitual es ponerla a funcionar los días no laborables por la mañana. Entre semana, su uso está más repartido a lo largo del día, con picos a las 10.00, a las 16.00 y a las 19.00.
Una forma de esquivar esos horarios punta y evitar que se dispare en exceso la factura es dejar programados los electrodomésticos para que se pongan en marcha durante las horas más baratas.
Se puede llenar el lavavajillas después de cenar, pero no ponerlo en marcha en ese momento, sino dejarlo programado para que el lavado se efectúe durante las horas valle, es decir, en algún momento entre la medianoche y las 8.00 horas. También se puede hacer lo mismo con la lavadora o la secadora.
También se puede hacer con la lavadora o la secadora, aunque habrá que tener en cuenta el ruido de los aparatos en funcionamiento durante esas horas nocturnas.
La OCU explica los pasos para programar los electrodomésticos:
Casi todos los lavavajillas, lavadoras y secadoras actuales cuentan con una función de «inicio diferido», esto es, un temporizador que permite programar su puesta en marcha a la hora fijada. Casi todos los electrodomésticos lo incorporan. Solo 15 de los 213 lavavajillas analizados por OCU y solo una de las 169 lavadoras carecen de la función temporizador o «inicio diferido». El procedimiento básicamente consiste en:
-Elegir el programa de lavado o secado deseado, de la manera habitual.
-Seleccionar la función de inicio diferido.
-Programar el número de horas que se va a retrasar el comienzo del programa.
-Pulsar el botón de puesta en marcha de la forma habitual. En algunas lavadoras, el tambor gira un par de veces.
Para seleccionar el número de horas hay dos procedimientos:
- Temporizadores continuos: En algunos modelos, pulsando la tecla marcada con un reloj, se puede ir aumentando las horas de una en una, hasta programar cuántas horas se quiere diferir el inicio, con un máximo de 24 horas.
- Temporizadores por tramos de 3h, 6h, 9h: Otros aparatos solo permiten diferir un número determinado de horas. Lo más común es que se pueda elegir entre retrasar el comienzo 3 horas, 6 horas o 9 horas, pulsando la tecla varias veces.
Cuando se use el inicio diferido en tus aparatos, se debe tener en cuenta cuánto dura el programa que desea utilizar (algunos programas eco pueden durar unas tres horas) para que todo el proceso se desarrolle dentro del horario barato. Por ejemplo, si son las 21.30 horas y se quiere programar un lavavajillas que tarda 3 horas en lavar, debe demorar el inicio como mucho 7 horas, para que el programa haya concluido antes de las ocho de la mañana.
Para electrodomésticos que no cuentan con una función de inicio diferido hay otra opción: utilizar un reloj programador que se coloca en el enchufe y corta el paso de la corriente hasta que llega la hora programada. Hay modelos manuales que se programan hundiendo las lengüetas de las horas a las que quieres que se conecte y programadores digitales con teclas y pantalla.
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