El Ibex tropieza de nuevo pese al rebote de la banca

El selectivo español retrocedió ayer otro 0,23% hasta los 9.307 puntos, a pesar del rebote del sector bancario que fue determinante para impedir que se perdiera ese nivel del 9.300. CaixaBank y Bankinter subieron más de un 3% al cierre, mientras que Santander, Unicaja y Sabadell avanzaron más de un 1,5%.

Estas entidades encontraron apoyo en el actual escenario de subida de los tipos de interés, que beneficia los márgenes del sector. Y, en este caso, la alegría vino por dos vías. Por un lado, los inversores cotizaron una nueva subida de los tipos de interés por parte del Banco de Inglaterra. El organismo monetario elevó de nuevo en 25 puntos básicos, hasta el 5,25%, su tasa de referencia, su nivel más alto desde abril de 2008.

Por otro, la expectativa cada vez más realista de una nueva subida de los tipos de interés por parte de la Reserva Federal (Fed) en septiembre, después de varias referencias macro que evidencian la resistencia de la economía.

Este entorno ha disparado en las últimas jornadas la rentabilidad de la deuda a diez años del país, con intereses que han pasado de cotizar del 3,8% al superar el 4,2% en apenas unos días. Al contrario que los bancos, las tecnológicas son las compañías peor paradas de este escenario de encarecimiento de la financiación, lo que también ha provocado fuertes pérdidas para el índice Nasdaq (que agrupa a las principales cotizadas del sector) en las últimas sesiones.

En todo caso, hasta este mismo viernes no se conocerá la referencia que marcará sin duda la próxima decisión de tipos de la Fed: los datos de paro en la primera potencia mundial que, si son peor de lo esperado, relajarían la tensión en torno a esa posible nueva subida de tipos.

Mientras, en el mercado de materias primas, el precio del petróleo recuperaba posiciones, con el barril de Brent, de referencia en Europa, repuntando cerca de un 2% hasta los 84,8 dólares, mientras que el West Texas estadounidense superaba los 81 dólares. Todo tras conocerse que Arabia Saudí extenderá al mes de septiembre el recorte voluntario de un millón de barriles diarios de su producción que comenzó a implementar en julio.