González de Lara: «La función social de la empresa ha quedado consagrada en esta dolorosa pandemia»

Para González de Lara, el papel de las empresas en este inédito momento de la historia de España demuestra que sector privado y sector público «son compatibles, nunca antagónicos». «Se ha roto el mantra ideológico de que los derechos sociales sólo se pueden garantizar desde lo público», ha asegurado, citando ejemplos como las telecomunicaciones, la energía, el comercio de alimentación, el sector sanitario o las entidades financieras entre otros servicios declarados esenciales. «Hemos visto cómo, a pesar de la intensidad de la demanda, no se ha caído Internet, ni la oferta energética; no ha habido desabastecimiento en alimentación, la logística ha seguido funcionando perfectamente o las farmacias han estado abiertas permanentemente», ha recordado.

Igualmente, el presidente de la patronal andaluza ha recordado que ésta no es una crisis «estructural ni de nuestro modelo productivo» y que por tanto «su solución no requiere necesariamente ni transformar el modelo productivo, ni más intervencionismo, ni nuevas normas, ni cuestiones ideológicas trasnochadas».

Lo que sí se necesitan de forma perentoria, según González de Lara, son «medidas que atiendan a las necesidades de pervivencia a corto plazo de las empresas, basadas en apoyos a la liquidez y a la flexibilidad laboral, así como de estímulo, sobre todo de la demanda, en sectores como el comercio o el turismo, que se han visto tan perjudicados». Eso sí, no ha negado la necesidad de pensar en el medio y largo plazo y «hacer más productivo el modelo», «incorporando la innovación, digitalizando procesos, apostando por la internacionalización, con financiación suficiente, con una fiscalidad más generosa y con un marco jurídico y administrativo más adecuado».

El líder de los empresarios andaluces ha advertido que vienen «tiempos duros para España». «Estamos ante el evento socioeconómico y geopolítico más importante desde la Segunda Guerra Mundial y la caída del Muro de Berlín junto a todo el bloque comunista, con efectos que cambiarán nuestra manera de trabajar, de consumir, de ahorrar, de viajar y de vivir», ha argumentado. No obstante, ha considerado una «suerte» formar parte de la UE en estas circunstancias.

González de Lara ha concluido su discurso recordando las lecciones positivas extraídas de esta crisis, que nos ha hecho «más humanos». «Nos ha permitido parar, pensar y cuestionarnos muchas cosas. La dimensión espiritual y la empatía ganarán terreno», ha apuntado. Para el representante de los empresarios andaluces, también es bueno que se estén recuperando «valores esenciales» como «la responsabilidad personal, el respeto por la vida humana, la dignidad de la persona, el sentido de la muerte, la protección de la propia salud y de los demás, ser más solidarios, más familiares, con más ayuda mutua, más benevolencia, cuidado e incluso compasión».