El sistema de riego subterráneo pone sus miras en Sudamérica

La compañía ha cerrado el año 2022 con un aumento muy importante de las ventas, hasta distribuir 180.000 unidades de su sistema, para un total de 350.000 desde que empezaron. Para este año las previsiones son aún mejores y esperan alcanzar las 400.000 unidades comercializadas. De momento, el 20% de los pedidos se van fuera de España, a una decena de países de Europa (Francia, Portugal y Alemania), Arabia Saudí, Catar, Israel y Sudamérica (México, Paraguay, Bolivia, Perú y Chile).

Precisamente en este último país, Creacciona, la empresa que tiene patentado el invento desarrollado por el torroxeño Antonio Rico junto a su hijo Ernesto, acaba de cerrar un acuerdo con una firma local para abrir una delegación comercial. Esto les permitirá aumentar las cifras de venta a los países situados al otro lado del océano Atlántico. Así, el sistema de riego subterráneo está funcionando ya con éxito en plantaciones de albaricoque en Bolivia; aguacates en México; arándanos, y de ciruelas y aguacates en Chile, entre otros muchos cultivos.

«Los problemas de sequía no sólo se dan aquí en la Axarquía, hay muchas zonas de estos países que también los tienen», cuenta este licenciado en Administración y Dirección de Empresas. Rico, con ocho empleados, detalla que los resultados son «muy satisfactorios», consiguiendo rebajar la huella hídrica en las plantaciones de aguacates desde una horquilla de 800 a 1.200 litros de agua por kilo de fruta a entre 250 y 350 litros.

«Estamos muy satisfechos con los resultados obtenidos, ya que logramos una mayor eficiencia en el consumo de agua en todas las plantaciones que han apostado por el uso de nuestro dispositivo», sostiene Ernesto Rico, quien detalla que Deep Drop es un sistema de riego patentado que lleva el agua directamente a la raíz de la planta «de manera totalmente automatizada, transformando cualquier sistema de riego de superficie, que son la mayoría de los existentes en la actualidad, en un sistema de riego subterráneo».

Según detalla el emprendedor torroxeño, los beneficios de su invento no se ciñen sólo a la reducción en el consumo de agua de riego, sino que se ha detectado una mayor producción en las plantaciones, al evitar situaciones de estrés hídrico en los árboles, al tiempo que previene el envenenamiento de la fauna, especialmente de las aves que ingieren el líquido elemento directamente de los sistemas de regadío en superficie, que suele ir mezclado, en numerosas ocasiones, con abonos y otros productos químicos.

«No es sólo por una cuestión de ahorro de agua en las zonas de sequía, sino que también permite optimizar el rendimiento de los abonos que se emplean en la agricultura, reduciendo el estrés hídrico de las plantaciones de aguacate», argumenta Rico, quien destaca que llevan más de tres años trabajando junto al Instituto de Hortofruticultura Subtropical y Mediterránea La Mayora, perteneciente al Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).

«Estamos firmemente convencidos de que Deep Drop supone un gran avance en el ahorro del agua de regadío, en un contexto marcado por la sequía y la escasez de recursos hídricos que están sufriendo numerosas zonas productoras agrícolas de nuestro país. Un ejemplo claro lo tenemos en la Axarquía, donde el pantano de La Viñuela se encuentra en una situación crítica, con niveles realmente alarmantes», destaca Rico.

Por último, el empresario torroxeño apunta, asimismo, que el sistema es válido para todo tipo de cultivos, tanto exteriores como bajo plástico, así como para jardines y parques públicos. En este sentido, desvela que ya ha habido también contactos con algunos ayuntamientos para estudiar su uso en parques y jardines municipales.