El antiguo edificio de A Novo en el PTA encuentra comprador tras diez años en desuso

Aristeas se define como «un grupo inmobiliario de capital permanente especializado en la adquisición, desarrollo y gestión de activos logísticos». Efectivamente, hasta ahora se había centrado su actividad en la zona metropolitana de Madrid, donde cuenta con cerca de 70.000 metros cuadrados de superfice bruta alquilable. Con esta operación, Aristeas sale de su feudo madrileño y también de la tipología de activo en la que se había centrado hasta ahora. Y es que el antiguo edificio de A Novo tenía un uso mayoritariamente industrial, además de una parte de oficinas.

Está por conocerse el proyecto que Aristeas tiene para este inmueble. Fuentes consultadas por SUR apuntan que podría destinarlo a oficinas, que es el tipo de superficie que más se está demandando en el recinto. También se plantea la incógnita de si se aprovechará el edificio ya existente o si se derribará y se levantará uno nuevo.

El antiguo edificio de A Novo o Vitelcom 2 (como se conoce en el PTA) ha sido objeto de múltiples robos y actos vandálicos a lo largo de esta década de abandono, especialmente en los primeros años del proceso concursal de Vitelcom, ya que no había vigilancia ni seguridad alguna. Todos los materiales que tenían algo de valor fueron sustraídos del inmueble, incluso los revestimientos de la fachada, por lo que ofrecía un aspecto lamentable. La nave principal de Vitelcom, que estaba en manos de otro banco (CaixaBank) también sufrió el abandono hasta 2013, cuando fue comprado por Del Paso Solar.

En 2018, el edificio fue alquilado con opción a compra por Inko, un fabricante de muebles de cocinas de Coín, que tenía el proyecto de trasladar allí su centro de producción. Sin embargo, finalmente esta compañía habría cedido su opción de compra a Aristeas.