Quinientos tractores cortan las carreteras de Antequera contra los costes de producción y los efectos de la sequía

Entre las demandas que «estimamos muy urgentes para que se lleven a cabo con el fin de paliar la grave situación en la que se encuentran nuestros agricultores y ganaderos» están evitar el recorte de ayudas que se pretenden con la PAC (Política Agraria Común), un plan de choque ante los «elevados costes de producción que nos asfixian», medidas de control en las fronteras ante las importaciones frente a las producciones de terceros países, y la necesaria actuación de un plan de infraestructuras hidráulicas que respondan ante períodos de sequía como el actual, exponen desde la organización.

Convocan las organizaciones agrarias de la provincia representadas por ASAJA (Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores), UPA (Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos) y COAG (Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos), junto a cooperativas agroalimentarias de Málaga, además de los sindicatos UGT (Unión General de Trabajadores) y CCOO (Comisiones Obreras).

El agricultor como eje de la vida y economía malagueña

Baldomero Bellido, presidente de ASAJA Málaga, prevé la presencia de quinientos tractores procedentes de toda la provincia, sobre todo de los pueblos de la comarca de Antequera. En dos años, lamenta que no se haya actuado por parte de ninguna de las administraciones, ni estatal ni europea, ante sus problemas. «El agricultor sigue siendo el último en cualquier política, normativa o plan que se realiza; además, estamos ahora sufriendo una sequía que nos preocupa por no saber cómo salir de ella».

Sobre la sequía insiste en la necesidad de «obras de envergadura ante la falta de agua que está llegando a una situación tan extrema. No valen obritas de emergencia, hay que cambiar la mentalidad porque el agua es un problema de Estado». Aunque lo ideal es que llueva como se espera en estos días «no depende de nosotros, por lo que en estos días estamos con las alegaciones del plan de inversiones hidrológicas de 2021 a 2027, pero estamos ya a 2022 y aún no se sabe cómo se va a invertir ni solucionar los problemas que existen de falta de agua».

Los costes de producción «siguen siendo uno de nuestros principales enemigos, ya que no funciona como se ha diseñado, ya que en vez de una solución es un mayor problema». La reforma laboral considera que está realizada «de espaldas a la agricultura y ganadería, ya que »el campo tiene una singularidad por la que depende de la época de recolección, la eventualidad es algo intrínseco a nuestro sector«. No entiende cómo no les han tenido en cuenta: »La mano de obra depende si hay o no cosecha; no se va a poder asumir los contratos que nos van a obligar a hacer. Los trabajadores cobraban sus subsidios y ahora van a tener problemas con este nuevo sistema. Los sindicatos están viendo que no se ha legislado teniendo en cuenta la idiosincrasia del campo«..

En estos dos años, la PAC sigue estando «en contra de los intereses de los agricultores malagueños y andaluces, ya que aquí tenemos más producción en las hectáreas que disponemos, en unos terrenos peculiares que nos hacen tener un mayor coste de producción donde tenemos muchas más obligaciones y menos ayudas». En cuanto a los productos que entran de otros países denuncia que afecta al aceite, tomates y cítricos. «Si aquí se establece que no se puede vender por menos de 20 céntimos, ¿cómo es que dejan que vengan y se vendan por menos de 10 céntimos?».