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La provincia de Málaga ha producido casi 54.000 toneladas de aceite de oliva en lo que va de campaña, la cual se puede dar ya casi por finalizada, a falta de la escasa producción que se haya podido recoger en el mes de abril. ... Desde que se iniciara la campaña, el pasado mes de octubre, y hasta su finalización en estos últimos días se han acumulado a nivel nacional algo más de 1.300.000 toneladas, de las que 44.550 pertenecen al mes de marzo. En el caso de la provincia, la producción es muy inferior a la esperada al inicio de la cosecha, cuando se estimaron en 72.000 las toneladas que se iban a producir.
Por su parte, y a nivel nacional, las salidas de aceite al mercado en el mes de marzo se sitúan, en esta ocasión, en el entorno de las 151.000 toneladas, «una cifra excelente, la segunda mayor del histórico para un mes de marzo», según han destacado desde la asociación Asaja en un comunicado. El ritmo de comercialización durante estos seis meses de campaña se sitúa por encima de las 143.000 toneladas mensuales, «el nivel de salidas medio más alto de este periodo», han apostillado. Para el cálculo de las salidas se han estimado unas importaciones de 8.000 toneladas, que se confirmarán una vez que Aduanas publique los datos consolidados a finales de mayo, fundamentales para determinar las salidas reales al mercado.
En cuanto a su distribución, alrededor de 103.000 toneladas se han destinado a la exportación y unas 48.000 toneladas al mercado interior. Por lo que respecta a las salidas de aceite de almazara, éstas han alcanzado «un volumen importante», rondando las 154.000 toneladas. El reparto de las existencias ha sido: en almazaras se sitúan en 779.360 toneladas, 109.000 menos que el mes anterior; en envasadoras son de 277.370 toneladas, unas 15.000 más que el mes anterior; y en el patrimonio comunal olivarero se sitúan en las 46.540 toneladas, 3.870 menos que en febrero. Las existencias totales a finales del mes de marzo eran de 1.103.270 toneladas, 98.360 menos que en febrero.
La falta de precipitaciones y el bajo contenido en aceite de la aceituna recolectada han sido los causantes de este descenso sobre las previsiones iniciales. La falta de precipitaciones es una realidad hasta la fecha, lo que unido a esta disminución en las expectativas de producción de aceite de oliva, están provocando un alza en la cotización de todos los tipos de aceite. «Si en un principio había mucha diferencia entre los vírgenes extra y los vírgenes y lampantes, en la actualidad dichas diferencias se están acortando de manera significativa, previendo el sector un ajustado equilibrio entre la oferta y la demanda en lo que queda de campaña«, han argumentado desde Asaja.
Por eso desde la organización agraria en Málaga recomiendan que hay que ser «cautos» ante las voces que están pidiendo la paralización de las ventas de aceite de oliva y el almacenamiento privado, pero por otro lado, «hay que defender la corta producción que se ha obtenido, sin dejar de crecer en mercados que nos pueden hacer falta para cuando la producción sea mayor, sin que se dé lugar a caídas como las que ya hemos vivido en otras campañas anteriores«, han finalizado.
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