Asaja Málaga reclama al Ministerio la inclusión de la Peste Porcina Africana en los Seguros de Ganado

El colectivo ha señalado en un comunicado que la epidemia se ha propagado por países como Bélgica y que otros como Dinamarca preparan levantamiento de cercas para evitar que entre en sus fronteras.

«Ahora mismo los seguros no cubren esta enfermedad y lo que pretendemos es anticiparnos, porque en caso de que entre en España, el ganadero necesita medios para mantener su trabajo y que no suponga una ruina en caso de que se viera afectado», indica Carlos Carreira, veterinario de Asaja. «Parece que está muy lejos -se refiere a la enfermedad- , pero no nos podemos descuidar», recalca.

Carreira señala que la cría de ganado porcino tiene especial importancia en la zona de la Serranía de Ronda, donde existen numerosas granjas en extensivo dedicadas al ibérico, mientras que en la zona de Guadalhorce y Guadalteba suelen ser en intensivo y de dedican al cerdo blanco. En Andalucía existen 6.174 explotaciones de porcino intensivo registradas, de las que 1.989 son de producción y cebo.

En la provincia existen dos de las principales industrias cárnicas del país dedicadas a la carne de porcino, Famadesa y Faccsa, que facturan entre las dos unos 500 millones de euros.

Por todo ello, desde Asaja en la provincia se pide al Ministerio de Agricultura que luche por un sector estratégico en España, apostando por incluir la peste porcina africana en los Seguros de Ganado, al considerar que así se protegerá a los ganaderos de porcino.

La peste porcina africana no es peligrosa para las personas, sin embargo en los cerdos puede provocar hemorragias y la muerte. La FAO la considera entre las enfermedades animales más a tener en cuenta. Se conoce desde 1910 y su llegada a España, tras la reciente detección en Bélgica de dos casos en jalabíes salvajes hallados muertos, preocupa porque el sector porcino ya ha vivido de primera mano las consecuencias de este virus. A finales de los años 50 llegó hasta la Península procedente de Angola. Actualmente en España está erradicada.

La enfermedad se transmite por contacto entre los animales enfermos y por la ingestión de restos de otros animales muertos, carne o restos de alimentos que contengan el virus. También puede viajar en vehículos entre explotaciones. No existen tratamientos efectivos para la enfermedad ni vacunas.