La Agencia IDEA resucita con 84 millones de euros para incentivar la innovación empresarial

Esos fondos se destinarán a nuevas convocatorias de ayudas que se lanzarán en los próximos meses de marzo, abril y junio, con «plazos ciertos y con todas las garantías jurídicas para el tejido empresarial«, según el consejero.

Así lo ha destacado Velasco en un encuentro en el Rectorado de la Universidad de Málaga ante empresarios y agentes del conocimiento andaluces, a los que ha explicado el detalle del nuevo calendario previsto en este programa de I+D+i, dotado con financiación Feder a través de la Subvención Global Competitividad-Innovación-Empleo de Andalucía 2014-2020.

En concreto, dicha medida se enmarca en el plan de reestructuración de esta entidad instrumental iniciado por el Ejecutivo andaluz en esta legislatura, que tiene por objeto lograr una nueva estructura más ágil y profesional y que conlleva, además, un relanzamiento de los incentivos europeos gestionados por la Agencia.

El consejero de Economía ha recordado que este instrumento de apoyo a la investigación empresarial «se encontraba bloqueado desde 2017, con unas 250 solicitudes pendientes de resolver, lo que supone dos años de incertidumbre para la empresa solicitante«. «Ya se han valorado positivamente todos los expedientes de concurrencia competitiva», ha aclarado, al tiempo que ha asegurado que esa labor «permitirá lanzar de forma inminente las nuevas líneas».

Velasco ha explicado que la nueva programación contempla cinco convocatorias. Este mes de marzo está previsto que se lance la primera de ellas, la línea de Unidades de Innovación Conjunta, dotada con 18 millones y dirigida exclusivamente a grandes empresas y organismos públicos de investigación, innovación y conocimiento. También en marzo se han programado los incentivos para financiar con 25 millones la modalidad de Proyectos Colaborativos.

Con posterioridad, en el mes de abril se convocarán las ayudas para financiar Proyectos de Investigación Industrial y Proyectos de Desarrollo Experimental para pymes y grandes empresas, presupuestadas en 23 millones de euros; y para el mes de junio se abrirá la categoría de Proyectos de Innovación en Procesos u Organización para pymes, con 10 millones.

Estas cuatro convocatorias se abrirán en régimen de concurrencia competitiva, mientras que la quinta línea contemplada, para el Fomento de la I+D+i internacional, valorará las solicitudes por orden de llegada, por lo que el procedimiento no será competitivo. Esta última está abierta desde 2017 y la Consejería de Economía ha decidido darle un nuevo impulso con una inyección de 7,8 millones adicionales.

El programa contempla subvenciones directas de hasta el 60% de la inversión para las grandes empresas interesadas en acogerse y de hasta el 75% para las pymes.

En relación con el reparto de los incentivos, la Consejería de Economía priorizará las iniciativas que potencien las dinámicas colaborativas y de innovación abierta; y las orientadas a fomentar la participación de las grandes empresas en colaboración con pymes y organismos de investigación para facilitar la generación y difusión conjunta del conocimiento generado en los proyectos.

De igual modo, se facilitará la participación de las pymes otorgando los máximos porcentajes de ayudas a las empresas de menor tamaño, y se prestará atención a las 'startups', entendiendo éstas como empresas «muy dinámicas, intensivas en conocimiento y con vocación de formar parte del mercado global».

Todas estas subvenciones se centrarán «en maximizar el aprovechamiento de los Fondos Europeos para incentivar la I+D en Andalucía, con el objetivo último de que no se pierda ni un solo euro comunitario», según Velasco.

Con el fin de facilitar el acceso del tejido empresarial a estas líneas, el titular de Economía ha explicado que la «nueva Agencia IDEA» ya ha creado «una red regional de asesores de I+D, con presencia en todo el territorio andaluz y en coordinación con los servicios centrales de la entidad«. Este personal dará información sobre las ayudas, sus características y el presupuesto disponible, así como sobre el procedimiento para presentar los proyectos, las fases de tramitación y la evaluación de las solicitudes.

Velasco ha incidido en que todas estas convocatorias de I+D+i «tendrán en esta legislatura un calendario cierto», ya que, según ha añadido, «somos conscientes de que las políticas de apoyo de la Administración a la innovación deben ser previsibles». «Las empresas han de conocer con antelación suficiente esas actuaciones públicas para que puedan incluirlas como una variable más en la toma de decisiones».

Por otro lado, ha recordado que el nuevo impulso a estos mecanismos de financiación europea ha supuesto la reactivación de más de 900 millones recogidos en el Fondo Público Andaluz para la Financiación Empresarial y el Desarrollo Económico, dotado con 423,5 millones; y en la Subvención Global Competitividad-Innovación-Empleo 2014-2020, presupuestado con más de 500 millones.

En el caso de la Subvención Global, además del Programa de I+D+i empresarial -objeto de este encuentro- se ha vuelto a activar el instrumento para fomentar el desarrollo industrial.

De acuerdo con los últimos datos de ejecución de estas dos herramientas, a través del Programa de I+D+i se han aprobado 96 iniciativas, con una subvención propuesta de 16,2 millones y una inversión privada inducida de más de 68,5 millones.

Mediante la modalidad para el Desarrollo Industrial se han aprobado y valorado positivamente 915 proyectos, lo que supone la concesión de 76 millones en ayudas, una inversión empresarial que supera los 240 millones y la creación y mantenimiento de 14.000 empleos. Estas cifras implican que por cada euro público se facilitan más de tres euros de inversión privada.

Al respecto, Velasco ha remarcado «el esfuerzo de la nueva Agencia en la gestión de dicho programa, paralizado en la legislatura anterior». «IDEA ha duplicado su ritmo de tramitación, pasando a gestionar una media de 100 proyectos mensuales frente a los 54 de la etapa anterior; y pasando a aprobar una media de 40 proyectos al mes frente a los 21 anteriores, lo que implica 2,1 millones de euros mensuales en incentivos, frente al millón de la legislatura anterior«, ha detallado.

Por su parte, el presidente de la CEA, Javier González de Lara, ha dicho que hay que felicitar al gobierno autonómico por resucitar IDEA y presentar «una serie de incentivos muy necesarios para las empresas».

Por último, el rector de la Universidad de Málaga, José Ángel Narváez, ha destacado el papel de la universidad en la innovación empresarial. «Las universidades tenemos que avanzar en este sentido pero también pido que las empresas vengan a la universidad a trabajar con nosotros», ha señalado.

«La Agencia IDEA es el brazo de la política industrial de la Junta tanto con recursos propios como por la canalización de los fondos comunitarios que realiza y que llegan, finalmente, a las empresas y empresarios», ha dicho Velasco, destacando el papel «fundamental» en el desarrollo económico de Andalucía.

Así, paralelamente al impulso de los instrumentos financieros, el plan de remodelación también persigue lograr una nueva estructura más ágil y profesional de la Agencia. Esta medida se fundamenta sobre dos ejes: por un lado, la reducción de casi el 50% de la estructura directiva y, por otro, la incorporación de funcionarios de carrera.

El Consejo de Gobierno ya ha dado luz verde a 19 efectivos, que estarán adscritos orgánicamente a la Consejería de Economía, Conocimiento, Empresas y Universidad, así como a las Delegaciones Territoriales de Empleo, Formación, Trabajo Autónomo, Economía, Conocimiento, Empresas y Universidad, y desempeñarán sus funciones en las sedes de la propia agencia.

Asimismo, la Consejería de Economía ya ha comenzado en enero a cambiar los estatutos de este ente instrumental que, con la nueva propuesta, pasará a ser presidido por el titular del departamento, Rogelio Velasco. Entre las novedades contempladas, destaca la incorporación al Consejo Rector de un letrado del Gabinete Jurídico de la Junta de Andalucía que ejercerá las funciones de secretario de dicho órgano. Con esta medida se busca dotar de mayor control y garantías a sus decisiones. Se pretende, además, despolitizar la gestión de dicho órgano, haciéndolo transversal e incluyendo, por primera vez, al mundo empresarial -a través de la CEA-; a emprendedores, a la Universidad y a escuelas de negocio.