El Unicaja ha vuelto

De nuevo Osetkoswki hizo una primera parte pletórica en ataque, anotando 13 puntos en los primeros 6 minutos para darle a su equipo las primeras ventajas en el marcador. Pero tras un tiempo muerto de Ponsarnau, el Bilbao, poniendo pausa en su juego y buscando alargar sus posesiones, iba consiguiendo controlar el ritmo de partido e igualar el marcador. La anotación de sus hombres de perímetro, especialmente Evans y Kullamae ya fuera tras 'pick and rooll' o tras penetraciones, con muy buena conexión con Killeya-Jones, su mejor hombre en Málaga y la eficacia para aprovechar segundas oportunidades en el rebote ofensivo le permitía a su finalización alcanzar los 45 puntos, con una proyección por encima de los 78,5 puntos de media que lleva en esta temporada.

Pero en el tercer cuarto el Unicaja salía con mucha más energía, poniendo mucha más presión al balón, saltando con agresividad al 'pick and roll', llegando a todas las ayudas, controlando el peligroso rebote ofensivo del rival y alejando a sus hombres de perímetro a la vez que punteando todos sus tiros, lo que propiciaba que poco a poco el Bilbao fuera perdiendo eficacia tras los buenísimos porcentajes de la primera parte y controlando a Killeya-Jones, que ya no se encontraba tan cómodo. El americano empezaba a fallar y a cometer errores que no había tenido en toda la primera parte.

Este nivel defensivo mostrado por el Unicaja en el tercer y cuarto periodos y la eficacia ofensiva y buena dirección de Carter desde el puesto de base propició también la aparición de jugadores como Kalinoski y Taylor, que se comportaron como verdaderos estiletes de su equipo, para dispararse en el marcador y dejar 59 puntos anotados en una gran segunda parte.