Zapata y Martínez ganan por la vía rápida en el Challenger de Marbella

El cuadro principal del Challenger de Marbella comenzó ayer con una mayoría de duelos que se resolvieron por la vía rápida. Tal fue el caso de los dos encuentros entre tenistas nacionales en la pista central. En el primero de ellos, Tommy Robredo (219º, pero que fue quinto del mundo) se retiró tras un rotundo 6-0 y 3-0 al que le sometía Bernabé Zapata (159º). En el otro, Pedro Martínez (93º), uno de los favoritos al título, barrió a Mario Vilella (183º) por 6-2 y 6-1.

Además, el francés Elliot Benchetrit (221º) remontó ante el número uno júnior, el danés Holger Rune (550º), uno de los invitados por la organización, por 1-6, 6-4 y 6-4. También pasaron ronda en otras pistas el británico Jay Clarke (189º y que ya estuvo en Puente Romano en la Copa Davis), ante el eslovaco Jozef Kovalic (126º), por 6-3 y 7-5 ; el luso Joao Domingues, frente al eslovaco Andrej Martin (102º), en un duro encuentro resuelto con 6-3, 3-6 y 7-6 (9), en dos horas y cuarto; el esloveno Blaz Rola (152º), ante el galo Maxime Janvier (206º), por 4-6, 6-2 y 6-4, y el francés Alexandre Muller (226º), ante el portugués Pedro Sousa (110º), por 6-3 y 6-4.

Para hoy están previstos tres duelos atractivos en la pista Manolo Santana, que abrirá con el choque entre el primer favorito, el argentino Federico Coria 89º) y Carlos Gimeno Valero (434º y llegado de la previa), seguido de la cita entre la gran promesa internacional Carlos Alcaraz (138º) ante el transalpino Lorenzo Giustino (154º), y el choque entre el único tenista local, Carlos Gómez Herrera y Steven Diez, un canadiense con vinculación con Málaga. La jornada comenzará a las 11.10 horas.

Una polémica entre cuatro tenistas nacionales (Pedro Martínez, Jaume Munar, Carlos Taberner y Roberto Carballés) y la organización del torneo fue la comidilla en la jornada de este lunes. Varios jugadores, como Martínez, emitieron comunicados de protesta en sus redes sociales. La queja era sobre el hecho de que hayan tenido que correr con los gastos de estancia en Puente Romano. Si bien en los torneos Challenger la hospitalidad siempre corre por normativa a cargo de la organización, ha de reservarse con un plazo preceptivo, que los cuatro afectados no cumplieron, como aclararon fuentes del torneo a este periodico, que dejó constancia también de que de los ssesenta tenistas presentes entre los distintos cuadros ellos son los únicos que no hicieron la reserva a tiempo. Otra cuestión es que el torneo hubiera subsanado el problema asumiendo el gasto, aún sin tener la obligación, pero en tiempos de pandemia y sin la inyección prevista de dinero por entradas, asumir este capítulo resulta siempre más complicado.