Párrizas domina desde el fondo

Tras el doble rosco de Sara Sorribes ante Fernanda Contreras llegó una victoria algo más apurada de Nuria Párrizas (80ª) frente a Renata Zarazua (277ª), por 6-4 y 6-3 en una hora y 34 minutos. Muy cerca de casa, la granadina, la raqueta número uno española, se impuso desde el fondo, con su característico juego agresivo e intenso, que desbordó por momentos a la mexicana asumiendo siempre todos los riesgos y la iniciativa del encuentro.

Al menos Zarazúa planteó más batalla que Contreras, aunque comenzó con un doble 'break' abajo. Hubo que esperar al decimosexto juego de la eiminatoria para que el país centroamericano ganara uno, y fue el comienzo de una tímida respuesta de la diminuta (apenas metro sesenta) tenista de 25 años de la populosa capital mexicana. Sobrina del extenista Vicente Zarazúa, ya había sido semifinalista en Acapulco y finalista en Concord, aunque llegó al duelo con una racha de seis derrotas seguidas, pese a lo que su capitán, Agustín Moreno, la eligió para los 'singles' por encima de Marcela Zacarías.

Zarazúa, 'Rena' para sus compañeras de equipo, ya había ganado en 2018 a Párrizas en Santa Margherita di Pula (Italia), con 6-1, 1-0 y retirada de la española, pero ayer esta sólo titubeó unos minutos tras el 3-0 de salida en el primer set. Aprovechando la potencia de los goles de la nazarí, la mexicana se montó sobre la bola y colocó algunos ganadores, que se sumaron a varios errores de la favorita.

Con ello se pasó al 4-4, pero el juego clave del partido fue el noveno. Después de tres intentos, Párrizas, que recibió instrucciones concretas de su entrenador (José Antonio Sánchez de Luna) desde un palco vip, rompió y ya puso la directa. Sólo tuvo que salvar otra fase irregular al comienzo de la segunda manga, pero el mayor cansancio de Zarazúa, demasiado exigida, decantó la balanza. Las estadísticas reflejaron 32 'winners' de la española y 18 de su rival, pero también hubo doce errores más de la ganadora (36-24), que mantuvieron cierta igualdad.