Los nervios devoran a Davidovich

Pese a todo, el primer set fue una obra colosal. La prolongación del estado de forma y confianza con el que estaba disfrutando en esta semana y media el rinconero en Colonia. En un santiamén se colocó con 3-0 y 30-0 con su saque. Todos los puntos ganadores entraban y su juego agresivo y arriesgado mostraba un margen de eficacia que en tenis es difícil de conservar muchos minutos. Schwartzman, quizás el jugador más rápido del circuito, no era capaz de llegar a las dejadas del rinconero, siempre con la mano hábil para sorprenderle a contrapié.

Pero llegados a ese punto del partido, Schwartzman anotó ocho puntos seguidos y rompió por primera vez el saque de Davidovich y se puso con 3-2. Fue un momento clave, porque el rinconero no se arredró y volvió a encadenar 'winners'. Muy eficaz con las bolas de ruptura, se llevó la manga en media por 6-2 y pensando ya que ese momento de gracia no se acabara.

Y así comenzó la segunda manga. Con otra ruptura nada más empezar y con las sempiternas que machacaron al argentino, nervioso porque en esta fase de temporada se juega el acceso a las ATP NITTO Finals (el Master de final de temporada). Pero los errores llegaron al malagueño y hubo 'contrabreak' después de una doble falta inoportuna, la primera, y un posterior juego en blanco al saque del argentino pareció devolverle la confianza.

Lejos de ello, Davidovich siguió impasible, quien lo diría hace unos meses, y le presionó en cada intercambio, para volver a colocarse con un 'break' arriba en el set, con 3-2 y saque. Sacó adelante su servicio y volvió a romper. Con 5-2 parecía todo el camino andado. La estrategia de retirarse del doble para tener más descanso y el hecho de no haber jugado el día anterior le vino de perlas también. Pero ya se sabe que cerrar los partidos siempre es lo más difícil. El malagueño tuvo una primera bola de partido, pero se le fue claramente el tiro ganador y se le escapó el saque. 5-3, 5-4... Máxima presión.

Los nervios consumían hasta al propio Jorge Aguirre, el preparador de Davidovich. Schawrtzman cambió de raqueta cuando ya iba a servir el malagueño, y luego lanzó otro pelotazo cerca de la cara de su rival. Los recursos fuera del juego en sí del argentino. La presión pudo a Davidovich, que se puso con 0-40, ganó dos puntos, pero se llegó al 5-5 y tocaba empezar de nuevo.

Cuando peor cariz tomaba todo Davidovich logró otro 'break' y se dispuso a sacar de nuevo para ganar el partido, pero fue su peor juego y se llegó al 'tie break', en el que la tendencia ya apuntaba lo que sucedió, el triunfo del argentino. Algo que tendría su continuidad en un tercer set en el que el argentino dominó por completo al malagueño, que sólo pudo arrancar un juego. Schwartzman venció finalmente por 6-1 y se apuntó un partido que se alargó durante dos horas y once minutos.