¿Por qué no juegan Muguruza ni Badosa en Marbella?

Igual que en el cartel de las Finales de 2022 de la Copa Davis en Málaga no aparecían Rafa Nadal ni Carlos Alcaraz, lesionado, en el de esta serie de la Billie Jean King Cup no están las dos tenistas españolas más populares del momento, Garbiñe Muguruza y Paula Badosa, que no ha logrado mantener una regularidad tras tocar techo.

Un clásico listado de Forbes citaba a ambas en el 'top 25' de las deportistas mejor pagadas del mundo, pero fundamentalmente a través de los contratos publicitarios. En una zona alta dominada por tenistas (con alguna gimnasta o golfista), Badosa figura en decimosexta posición con 6 millones de dólares ganados en 2022, y Muguruza, vigésima cuarta con 5,2 millones.

En concreto, Muguruza se ha tomado un tiempo sabático. Se rumorea incluso su retirada, con sólo 29 años y tras haber sido número uno del mundo en algunas semanas de 2017 y 2018. «Estoy pasando tiempo con la familia y los amigos y está siendo muy saludable e increíble para mí, así que voy a alargar este periodo hasta el verano, de manera que me voy a perder la temporada de tierra y de hierba», declaró hace semanas en su perfil en redes sociales. Esta semana se conoció su ruptura con su entrenadora los tres últimos años, Conchita Martínez.

A día de hoy es la 131ª y seguirá cayendo sin competir. Ha ganado doce partidos entre 2022 y este año, la que fuese vencedora en Roland Garros (2016), Wimbledon (2017) y la Copa de Maestras (2021), además de la final del Open de Australia (2020).

Mientras, Badosa, después de ser número dos mundial en abril de 202, ahora es 33ª del 'ranking' y, aunque estuvo en Glasgow en noviembre en las Finales de 2022 de la Billie Jean King Cup, probablemente renunció a estar en Marbella para enfocarse en el WTA Tour. La capitana, Anabel Medina, a una pregunta de este medio, rehusó a hablar de este tema «por respeto a las jugadoras presentes». Badosa debutó precozmente en la Copa Federación, en una llamada de Conchita Martínez, cuando tenía sólo 16 años.

Badosa, que como Muguruza conoce bien Puente Romano, donde han ido a entrenarse, ha jugado seis torneos en este 2023, con nueve victorias y seis derrotas. Lo mejor fueron unas semifinales en Adelaida, pero se lesionó y no fue al Abierto de Australia. La neoyorquina crecida en Begur (Gerona) de padres modelos y a la que le gusta ese mundo, tiene casi un millón de seguidores en redes sociales y es muy seguida por la prensa rosa.

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