Manolo Santana, «un malagueño más», reconocido por SUR en 2017

La pérdida de Manolo Santana se hace sentir con especial intensidad en Málaga, donde se afincó el legendario tenista madrileño y ha terminando gozando de una gran vida social y un mayor reconocimiento. Este cariño hacia su figura se escenificó hace ahora justo cuatro años, en 2017, en los premios anuales de SUR, 'Malagueños del año', donde Manolo Santana asistió con gran ilusión y fue reconocido por su trayectoria única y su aportación a la provincia como entrenador y promotor de eventos.

«Recuerdo que hace 37 años vine a jugar un pequeño torneo a Málaga y vi que me gustaba mucho esta ciudad y el carácter de su gente, los andaluces. Yo me siento, con el permiso de los madrileños, un andaluz más», expresó en su discurso (pincha aquí para ver el vídeo) para la ocasión, en la que estuvo acompañado de un jovencísimo Alejandro Davidovich que acababa de proclamarse campeón júnior en Wimbledon. Santana se mostró «muy orgulloso» del tenista de la Cala del Moral y le dio su bendición.

Santana llegó a Marbella hace más de treinta años para jugar un torneo y, luego, para establecerse allí con un contrato profesional de un año. Más tarde, con origen en los tiempos de Jesús Gil, llegó su gran labor al frente de la sociedad Racquets Club Marbella. Santana da nombre a la pista central del Club de Tenis Puente Romano, escenario de su iniciativa y ha sido pieza importante con su apoyo en la concesión a esta entidad de la eliminatoria de octavos de final de la Copa Davis de febrero entre España y Gran Bretaña. Asimismo, fue nombrado hijo adoptivo de Marbella por el Ayuntamiento de la localidad costasoleña.

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