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«Yo le pongo mis fichas a Brooksby. Es un tipo especial, podría ser el número uno. Su mente funciona de otra manera. Tiene un plan, analiza las cosas, es complicado de enfrentar. Me recuerda a Djokovic desde la línea de fondo, juega con muchísima ... profundidad, se desplaza genial, golpea bien, tiene buen tamaño y esos intangibles que no se ven. Tiene ese 'factor-X', esa mentalidad, que puede convertirle en campeón de Grand Slam». Las palabras de alabanza eran de su compatriota Reilly Opelka. El gigante suele ser de los tenistas más snceros del circuito en sus declaraciones.
Lo cierto es que Jenson Brooksby, próximo rival de Alejandro Davidovich este viernes, en los cuartos de final del ATP 250 de Amberes, en pista 'indoor') va a suponer un complcadísimo reto, pese a estar por debajo en el 'ranking' (70º) y ser más inexperto. Nada de ello es óbice para que las apuestas le den como claro favorito, con un 14-5 de balance en la gira en pista dura reciente. De hecho, barrió por 6-2 y 6-0 a Botic van de Zandschulp en octavos.
Brooskby, formado en el tenis universitario estadounidense, es la gran esperanza (si no ya realidad) de su país, que en mayo comprobaba cómo se quedaba sin representantes en el 'top 30' por primera vez desde 1973. Para quien no le ha visto jugar, sorprende su juego, poco vistoso pero muy eficaz. Aparentemente desgarbado en sus movimientos (mide 1,93), nada plásticos, domina el ritmo de los partidos con una inteligencia excepcional en la pista y capacidad para adaptarse a lo que requiere cada partido, de ahí que se le considere potencial número uno en el futuro.
«Para mí, el tenis no va de potencia o de golpear más fuerte. Consiste en aprender dónde golpear cada bola. Para mí, el tenis se trata de elegir el golpe correcto en el momento justo», ha llegado a afirmar en una buena formulación de su estilo de juego.
Alejandro Davidovich es plenamente consciente de la dificultad que implica medirse este viernes a Brooksby (en cuartos de final del ATP 250 de Amberes), que viene escalando puestos en el 'ranking' de la ATP de forma vertiginosa. «Es un jugador joven, juega muy bien. Se le ve con muchas ganas de asentarse en el circuito, va a ser un partido seguramente muy entretenido de ver», manifestó este miércoles en la rueda de prensa tras jugar ante Garín.
Respecto a su reciente trayectoria, marcada por varias eliminaciones en primeras rondas que le hicieron perder hasta quince puestos en el 'ranking' (del 32º al 47º), el rinconero declaró: «Al final creo que todos pasan por una mala racha. He tenido meses muy difíciles después de las Olimpiadas. Pero eso hay que superarlo. He estado con unos meses jodidos, pero siempre con la ilusión de seguir jugando y mejorando».
De momento, su balance es de 26-20 en la temporada, y de 14-11 en su carrera sobre pistas rápidas, en el poco tiempo que lleva en el circuito, porque en 2020 sí rindió a buena altura en ellas, tras el confinamiento. «Me considero un jugador que me adapto bien a todas las superficies. Depende mi cabeza cómo esté en ese momento. Pero en ese sentido creo que estoy madurando más», declaró.
Además, la importante victoria (4-6, 6-3 y 6-3) ante Garín del miércoles es la séptima victoria de Davidovich en su carrera ante un 'top 20', después de las logradas ante Monfils, Khachanov, Bautista, Berrettini y Ruud, las cuatro últimas, este año. Es la quinta vez que alcanza los cuartos de final de un torneo en lo que va de temporada, y busca su cuarta semifinal (dos en Estoril y una en Colonia), todas en la categoría ATP 250.
El caso es que Brooksby ha explotado a punto de cumplir los 21 años (el martes). Comenzó 2021 aún en torneos Challengers, pero ganó tres casi seguidos (en Sudáfrica y, en 'casa', en Orlando y Tallahaasse) y adquirió un 'ranking' para probarse en el ATP Tour, donde llegó a la final en hierba en Newport, fue semifinalista en el ATP 500 de Washington, y se quedó en octavos de final del US Open, ganando el primer set a Novak Djokovic con sumo desparpajo.
«Es muy talentoso e inteligente en la pista. Su tenis es muy versátil, y me recuerda un poco al de Florian Mayer, aunque él tiene mucha mejor movilidad. Lo que más me ha impresionado es su madurez mental y cómo sabe absorber la potencia de los golpes del contrario tanto con su derecha como con su revés. Creo que lo veremos mucho en el futuro, le auguro una gran carrera porque me ha impresionado su tenis, pero también su actitud competitiva y fortaleza mental», declaró entonces el serbio.
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