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En un descalabro más en las últimas semanas, Alejandro Davidovich (28º) cedió a las primeras de cambio en el Masters 1.000 de Montecarlo. Hablamos de un 'top 30' que pasa de ser subcampeón en el torneo en 2022 a ceder en la primera ronda ... en 2023 y 2024. Tras perder 600 puntos en el 'ranking' hace un año, ahora no los defendía, pero el problema es la falta de crédito y la desconfianza que genera este varapalo en su juego.
No anda bien el tenis español, que metió a sólo cuatro jugadores en el cuadro final de este torneo (y uno de ellos Bautista, tras la fase previa) y cuando la mitad (el malagueño y Munar) ya se han despedido del mismo, y menos aún camina hacia adelante el pupilo de Jorge Aguirre, sumido en una crisis de identidad importante respecto a su tenis. A día de hoy ya no se adivina si le va mejor la tierra o jugar en rápida, y algo que tiene un carécter más nuclear: si saca ventaja de un esquema a pocos golpes, agresivo, arriesgado, sin defenderse tanto desde el fondo o si le vendría mejor un guión diferente, devolviendo más bolas sin forzar tanto la definición de los puntos.
'Aces': 0/8
Dobles faltas: 1/1
Primeros servicios dentro: 74/67%
Puntos ganados con 1º saque: 43/72%
Puntos ganados con 2º saque: 46/44%
Puntos de 'break' convertidos: 1-5/5-10
'Winners' 9/18
Errores no forzados: 9/9
Total de puntos ganados 42/62
Bajo esta perspectiva este martes, en el primer descanso que concedió una lluvia arreciante en el Montecarlo Tennis Country, Sebastian Korda (27º) ridiculizó por momentos al rinconero: 6-1 y 6-2 en apenas una hora. Fue magistral el partido del estadounidense, el hijo del mítico Petr Korda (ex número dos mundial), especialmente al resto, pero se creció todo lo que le permitió su oponente, en una sucesión de errores.
Davidovich sólo sacó adelante dos juegos al saque, en una pista con condiciones muy húmedas y bola pesada, lo conocido en una jornada de lluvia. Lo que más peso en su moral, muy débil en los últimos tiempos, es perder los cuatro primeros juegos, que pasaron todos por el 'deuce'. Un completo desastre, siempre con Korda definiendo a pocos golpes, con muchos 'aces' a la 'T'.
Korda knocks out Fokina 🥊
— We Are Tennis (@WeAreTennis) April 9, 2024
Impressive win by the US player who dominates 2022 runner-up 6-1 6-2
On next round he meets THE in-form player of 2024: Jannik Sinner 🔥pic.twitter.com/eH5SIGPell
A duras penas Davidovich sólo llegó a sacar un juego que le permitió empezar al servicio la segunda manga, un escenario buscado cara a un deseado giro en el choque que nunca llegó. El juego del primer quiebre para Korda ya en ese periodo, el tercero, fue un 'autobreak' del malagueño, con dos regalos difíciles de entender tras el 30-30. Y llegó un segundo 'break'. Cuando Fokina logró el 4-2 y su primera rotura a favor, vino después otro juego pésimamente disputado que terminó de cerrar el partido, entre lamentos hacia su entrenador cada vez que se dirigía a la silla.
El debut en la gira de arcilla, tras su baja en Estoril por un problema dental, no ha sido ni mucho menos el deseado tras una mala racha anterior, con derrotas demasiados contundentes ante Medvedev (Dubái), Fils (Indian Wells) y Ruud (Miami), que certifican una trayectoria errante. Peligra el 'ranking' del malagueño, y con ello su condición de cabeza de serie en la mayoría de torneos, lo que a su vez complicará sus cuadros en las primeras rondas. Una espiral que necesita un reseteo. Mucho ha cambiado de aquel Davidovich que se jugó el título ante Tsitsipas en Montecarlo al de ahora, irreconocible. Barcelona, Madrid, Roma y Roland Garros llegan ahora casi sin pausa.
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