Davidovich remonta ante Cachín

Fue lo que le sucedió al argentino Pedro Cachín (49º), un 'don nadie' cuando llegó a Barcelona en 2015 para ser mentorizado por Álex Corretja, algo más que un hermano para él y que, tras cinco títulos Challenger, se impuso hace días en Gstaad (Suiza) al fin en el ATP Tour para situarse ya en el 'top 50', su tope a los 28 años.

Los inicios no fueron nada esperanzadores para Davidovich, con sólo cinco puntos al resto en la primera manga. Dobló casi en errores no forzados (6/11) a su rival, que dominó claramente con un 92% de puntos ganados con primeros. Parecía un 'dejà vù' de lo sucedido una semana antes ante Kovalik en Bastad, esta vez sin atenciones médicas ni el argumento del cambio de superficie (tierra) tras la gira en hierba.

 

Pero el segundo set ya fue otro cantar. Davidovich, que había ganado en los dos precedentes, ambos en arcilla, a Cachín (eso sí, muy lejanos, en un Future en San Sebastián y un Challenger en Sevilla en 2017), repitió éxito al ofrecer un punto más de agresividad y determinación en su juego, al punto que su rival se agotaba.

La segunda manga fue una constatación clara del cambio de rumbo. Pese a ello hubo que esperar al undécimo juego para que Davidovich tuviera al fin punto de 'break', después de hora y cuarto de partido, algo casi inédito jugando en tierra en el malagueño, que se vio con un 0-40 y lo aprovechó. Fueron 24 puntos de 36 ganados desde el fondo por el pupilo de Jorge Aguirre en este parcial, en el que ganó ya el 90% de primeros saques. Nada que ver con el inicio.

El set definitivo fue coser y cantar, porque Davidovich se vio dos 'breaks' arriba y Cachín parecía exhausto, sin correr a bolas cercanas a la red y seleccionando mal alguna dejada, síntomas evidentes de su cansancio tras jugar cinco partidos la semana anterior, cediendo un solo set.

Ahora al tenista asentado en Fuengirola le espera este miércoles el joven francés Luca Van Assche (77º), al que ya ha vencido dos veces este año sobre polvo de ladrillo, en Estoril y Roland Garros. Buscará el pase a cuartos desde donde tendría ya un cuadro muy duro, con un cruce con Alexander Zverev y, en semifinales, Casper Ruud, vencedor en Bastad.