Así es el equipo de España que jugará en Málaga

No lo tendrá fácil la 'Armada' en Málaga en las Finales de la Copa Davis (22 al 27 de noviembre), y menos después de lo sucedido en las semanas previas al torneo. El cambio de formato no favorece sus posibilidades, al conceder mas crédito al punto de dobles, que vale un tercio de cada eliminatoria. Como quiera que España, con importantes jugadores individuales que apenas alternan durante el año, no tiene una pareja consolidada en esa disciplina (no la ha tenido en todo el ciclo de la seis Ensaladeras conquistadas desde 2000), se ve casi obligada a no fallar en los dos choques de 'singles'.

Con este panorama España volverá a jugar de local en la Copa Davis, como en la fase de grupos de Valencia, y se confía que el público, pese a la amplia presencia internacional de aficionados, sea un factor más.

Sergi Bruguera podía haber tenido a los números 1 y 2 mundiales a sus órdenes, Carlos Alcaraz y Rafa Nadal, pero al final no dispondrá de ninguno de ellos. Era conocido de antemano que el balear se ausentaría en el torneo (no compite en él desde las Finales de 2019) porque reduce al máximo su calendario para poder rendir en su mejor condición física en las citas elegidas y estará junto al noruego Casper Ruud en una gira por Sudamérica con partidos de exhibición.

Pero con lo que no se contaba es con ese desgarro abdominal de Carlos Alcaraz en el torneo de Paris-Bercy. Tras setenta partidos este 2022, su cuerpo no pudo más y las Finales se quedaron sin su gran aliciente. A Bruguera le toca jugársela con Pablo Carreño (13º) y Roberto Bautista (21º) para los números '1' y '2' de la serie, porque el castellonense, teóricamente el '2', rindió a gran nivel en la fase anterior, con tres victorias en otros tantos encuentros en Valencia.

Un primer dilema lo resolvió a favor de Albert Ramos (39º), que es el jugador '4', quedando fuera Alejandro Davidovich (32º), que podía haber sido el único jugador anfitrión. Para el dobles es seguro Marcel Granollers (13º), pero la 'patata' más caliente será solventar con quién lo juega. A priori, si la serie ante Croacia (u otras posteriores si las hay) está resuelta, a favor o en contra, parece probable que juegue Pedro Martínez (61º en individuales y 74º en dobles). Si no, con 1-1, tocará apostar por Carreño o Bautista para buscar el pase.

Su triunfo en el Masters 1.000 de Montreal ha sido su mayor éxito de este curso, en un año en la que ha tenido algo de irregularidad. Pese a todo, el gijonés es un tenista que compite muy bien en todo tipo de superficies y suele ser fiable, aunque llega a Málaga con seis victorias y cinco derrotas en las once últimas citas. Atraviesa la etapa más madura de su carrera y tiene un buen recuerdo de la provincia, porque en 2021 ganó un ATP 250 en Marbella. Fue baja en Valencia en la fase de grupos.

Se le recuerda por la proeza de jugar en las Finales de 2019 tras el fallecimiento de su padre. Tenista muy humilde, de una ascensión lenta pero sólida durante su carrera, se mantiene desde hace años en el 'top 20'. Con una gran condición física, no falló en Valencia en todos sus partidos y puede ser un número '2', si lo estima Bruguera, de gran nivel respecto a otras selecciones. Como la mayoría del grupo, no llega en el mejor momento del año, con cinco triunfos y otras tantas derrotas tras despuntar en la Fonteta.

Veterano especialista en tierra, que aporta oficio y calma en su juego, muy consciente de sus virtudes y limitaciones a sus 34 años. Pese a una serie de una victoria y seis derrotas en rápida y un peor 'ranking' (39º) que Davidovich (32º), ha tenido la confianza de Bruguera, quizás por su victoria ante Djere en Valencia, cuando tuvo que suplir a Alcaraz, que regresaba de Nueva York muy cansado. Este año gano un título en Argentina en arcilla, pero las pistas 'indoor' se le atragantan.

Después de una carrera individual buena, pero sin alcanzar el nivel de los mejores tenistas españoles de los últimos tiempos, se centró en dobles, con diferentes parejas. Ahora se ha unido en el circuito al argentino Horacio Zeballos. Este año ganó el torneo de Halle y fue semifinalista en Australia y Roland Garros. Desde 2009 y hasta la actualidad, salvo en 2013 y 2015 siempre ha sumado títulos en dobles, los más importantes cinco Masters 1.000 y las ATP Finals de 2012.

El valenciano ha acudido siempre como solución de emergencia en el equipo, cuando ha habido bajas, y tiene un 2-2 de balance en el torneo, cumpliendo en la última fase de grupos al ganar junto a Granollers dos duelos de dobles, ante Corea y Serbia, pero en Málaga la exigencia será mucho mayor. Este 2022 ganó en Santiago de Chile un ATP 250, y también conquistó, junto a Sonego, otro en dobles en Kitzbuhel, pero ambos en tierra, donde mejor compite. Suele jugar torneos durante el año en dobles, sin ser su prioridad ni un especialista tan consumado como Granollers. El de Alzira es un jugador aún en progresión, al que entrena el hermano de Marcel, Gerard.

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