Pablo Carreño gana un partido casi diez meses después

Este martes, al fin, Carreño conjugó el verbo ganar. Lo hizo remontando ante el francés Arthur Cazaux (124º), por 2-6, 6-4 y 6-3 en dos horas y 36 minutos. De menos a más. Lento de maniobra, sin ventajas con su servicio (2-12 en 'aces' y 5-1 en su contra en dobles faltas), ganó por talento, que eso no se pierde, aprovechando mucho mejor los puntos de tensión (4-6 en bolas de 'break' por 3-10 de su oponente) y siendo paciente, sin desconcentrarse.

Al haber estado más de seis meses de baja (aunque casi siempre entrenándose, haciendo físico y hasta con la raqueta) puede acogerse al 'ranking' protegido y acudir con su clasificación de antaño y acudir a torneos del ATP Tour, pero ha preferido empezar poco a poco, en Challengers, para recuperar la confianza. La victoria de este martes, ya de noche en la central de Inacua, la celebró como un gran éxito, en lo que hubiera sido casi un trámite hace un año ante Cazaux, que por momentos olió la sangre, pero sin cobrarse la pieza.

La última victoria de Carreño, que hace casi un año estuvo en Málaga en la Copa Davis, fue el 17 de enero ante Cachín en el abierto de Australia y dejó de competir el 13 de febrero tras caer en primera ronda en Rotterdam. Ahora se cruzará el jueves en octavos ante el italiano Matteo Belucci (144º), uno más de la amplia generación de tenistas transalpinos que trata de introducirse en el 'top 100'. Más acomodado a la pista rápida, remontó su cita ante Roberto Carballés (61º), en el segundo turno de la central.

La jornada la abrió otra decepción española, la de Bernabé Zapata (70º), con una segunda mitad de año muy pobre tras haber se situado 37º en mayo. El valenciano se retiró al término del primer set (2-6) lejos de tener buenas sensaciones. El cuadro de octavos, que arranca este miércoles presenta, además de Carreño, otros cuatro españoles: Roberto Bautista y Pedro Martínez, clasificados ya el lunes, y Albert Ramos (93º) y Alejandro Moro (253º), llegado de la previa, y que se deshizo en dos mangas (6-1 y 7-6 (3)) del menos brillante de los hermanos Ymer, Elias (172º).

Mientras, Ramos sufrió más de ante el búlgaro Adrian Andreev (243º). Reaccionó estando un set abajo y encadenó nueve juegos seguidos, pero todo se le complicó con 5-5 y 0-30 en el tercero, per salió airoso (7-5) tras dos horas y media de lucha en el penúltimo turno de la central.

Para este miércoles el programa en la pista principal lo abrirán el italiano Fabio Cobolli (121º) y el búlgaro Dimitar Kuzmanov (187º), a las 11.00 horas; seguido por el Maxime Janvier (397º)-Agustín Tirante (111º), no antes de las 12.30; el duelo fratricida entre los galos Ugo Blanchet )324º) y el ganador de 2022, Constant Lestienne (107º), no antes de las 14.00, y un atractivo cierre con Bautista y el británico Billy Harris (304º), no antes de las 17.00 horas y que no debería plantear demasiados problemas al castellonense, pese a su inactividad.