Alejandro Davidovich salva esta vez cuatro bolas de partido ante Bellucci

Tenía ganas Davidovich de estrenarse en Acapulco, el torneo que nunca se había cruzado en su camino que más deseaba conocer. Y el sabor final, no sin sufrimiento, fue agradable ante un Mattia Bellucci (70º) que acabó literalmente desfondado ante los 30 grados y la alta humedad con la que se inició el choque, con ventiladores junto a los bancos de cada jugador.

Al italiano ya se le conocía en Málaga. Fue subcampeón en 2023 en el Challenger en Inacua. Lo derrotó el francés Blanchet, pero a la postre ha sido el de Busto Arsizio el que ha aterrizado ya en el 'top 100', en un gran 2025, sobre todo con una excelente actuación en el ATP 500 de Rotterdam, en el que se deshizo de Tsitsipas y Medvedev para llegar a semifinales.

Sin embargo, en Acapulco accedió al cuadro final como 'perdedor afortunado', después de ganar sólo un juego ante Diallo en la final de la previa, quizás ya sabiéndose con plaza en el torneo en cualquier caso. Zurdo, con un saque letal, pese a sus 1,77 metros. Combinó la potencia con efectos diabólicos, difíciles de leer para Davidovich, que entregó el primer set en menos de media hora: 6-1.

No alcanzó ningún 'break point' y se dejó ir al final esperando una guerra más igualada en el segundo periodo, como así fue. Con muchos menos errores no forzados, la manga se fue a más de una hora, con un desarrollo increíble, porque Davidovich malogró tres bolas para forzar el tercer set antes del desempate.

Muy sólido ya en el saque, elevando claramente sus porcentajes, le costó sin embargo llegar a esas primeras opciones de quiebre. Bellucci siempre se sacaba de la manga un golpe con un 'topspin' especial o un servicio que sacaba a Davidovich de la pista, incluso con segundos. Salvó una situación casi desesperada con 4-4 y 15-40 con su saque y dispuso de una primera posibilidad de ruptura en el noveno, aunque la mejor la tuvo con 6-5 y 40-30 al resto, en un intercambio largo y un tiro que se le escapó por muy poco.

Increíblemente, en el 'tie break' se salvó tras un 2-6 al ganar seis puntos seguidos, y ese impulso, la otra cara de la moneda de lo vivido en Delray Beach, le llevó en volandas en el set definitivo, en el que dos quiebres a favor sentenciaron ya a un rival derrengado y sin ánimo de seguir en la pista, quizás aún repasando mentalmente sus errores en la funesta 'muerte súbita'.

Ahora Davidovich se medirá a Frances Tiafoe (18º), que se deshizo en dos sets de Alexandre Muller. Será no antes de las 4.00 de la madrugada de este jueves (en España). El norteamericano, sin resultados especiales este año, domina por 2-0 en el cara a cara. Especialmente doloroso para el malagueño fue el tropiezo en cuartos de Estoril en 2022, y hace pocos meses cedió en primera ronda en el Masters 1.000 de Cincinnati.