El Waterpolo Málaga femenino competirá por primera vez en la segunda división nacional

Aunque ya se venía comentando esta noticia en los entresijos del mundillo del waterpolo no fue hasta hace sólo unos días cuando la Federación Española de Natación trasladó al Club Waterpolo Málaga la oportunidad de subir a Segunda, algo que para la entidad, aunque suponga un esfuerzo económico, no pudo rechazar.

Este equipo femenino se proclamó el pasado año campeón de la Copa de Andalucía y subcampeón de la Primera Andaluza femenina, optando así a la fase de ascenso en la que acabó quedándose a las puertas del objetivo de subir. De hecho, en la eliminatoria contra el CN Ciutat de Palma, las jóvenes malagueñas estuvieron a punto de remontar los ocho goles que traían de desventaja de la ida, y se quedaron a dos de obrar el milagro.

Finalmente, las pupilas de Sara Fernández concluyeron terceras en este 'playoff', por lo que no pudieron lograr deportivamente el billete a la segunda división. Sin embargo, este ha llegado en los despachos, a tenor de una denuncia doble y mutua que se lanzaron dos de los equipos que sí lograron ascender en la piscina, el CN Ciutat de Palma y CW Askartza, que fueron acusados de alineación indebida.

La investigación de la RFEN acabó determinando la descalificación de ambos clubes, dejando paso al club con sede en Inacua, que ha aceptado la oportunidad de competir en esta categoría nacional por primera vez, con un equipo jovencísimo y centrado en el talento de la cantera local. Se convierte así en el máximo exponente del waterpolo femenino provincial. Ahora, en cuanto acabe la Copa de Andalucía, el conjunto se pondrá el mono de trabajo para prepararse cara a su debut en esta nueva y más exigente liga. Lo hará en el Grupo A de la Primera División femenina, el próximo 13 de octubre ante el Boadilla de Madrid.