Sudáfrica y Nueva Zelanda dirimen este sábado el reinado mundial del rugby

Se trata de una supremacía por la que siempre pugnan los mismos: Sudáfrica y Nueva Zelanda. Las dos superpotencias que han llevado al Hemisferio Sur la hegemonía de este deporte, nacido en la Inglaterra de mediados del siglo XIX como un derivado del entonces incipiente fútbol, juegan el sábado por la noche la esperada final de la décima edición de la Copa del Mundo de Rugby.

La competición nació en 1987, cuando el deporte apenas comenzaba a insinuar los primeros pasos de su profesionalización, y desde entonces sólo ha habido cuatro campeones. Por delante de Inglaterra, que se coronó una vez, y Australia, que lo hizo dos veces, Nueva Zelanda y Sudáfrica llegan a esta final como tricampeones. El partido del sábado pondrá nombre al primer tetracampeón de la historia.

Los dos contendientes han recorrido hasta el partido decisivo un camino similar. Ambos perdieron en la fase de grupos con los candidatos europeos que iniciaron la competición con la estola de favoritos. Los All Blacks neozelandeses cayeron ante la anfitriona, Francia, en el partido inaugural y los Springboks sudafricanos, ante la entonces número uno del ranking mundial, Irlanda. Ello impidió que se cruzaran en cuartos de final, donde intercambiaron papeles para derrotar a las selecciones europeas. Los All Blacks superaron a Irlanda en el posiblemente mejor partido de la historia y los Springboks bañaron de lágrimas a los franceses, que por segunda vez fracasan en un mundial jugado en casa.

Ya en semifinales, las dos potencias del Sur dieron cuenta de los aspirantes que llegaban por el otro lado del cuadro. Nueva Zelanda derrotó sin contemplaciones a Los Pumas argentinos (44-6) y Sudáfrica, que defiende el título conseguido en Japón 2019, sufrió hasta el último minuto para desplazar a Inglaterra (16-15) en una reedición de la final de hace cuatro años.

Este sábado las dos superpotencias vuelven a verse las caras en un partido que ofrecerá un choque de estilos, la perfección técnica de Nueva Zelanda frente a la supremacía física de Sudáfrica. El partido se juega a las nueve de la noche en el Stade de France (Movistar+)

24 horas antes, Inglaterra y Argentina se medirán por el bronce en el mismo escenario.