Momo González y Álex Ruiz dejan escapar el título del Premier Padel de Burdeos

El alhaurino no llegaba a una final desde el Open de Málaga del World Padel Tour, en julio del pasado año, con Juan Tello; mientras, el antequerano no lo hacía desde el Master de Marbella de junio de 2023, junto a Sanyo Gutiérrez. Después de tanto tiempo y tras pasar casi un año separados y darse una segunda oportunidad como pareja, fue especialmente emocional para ambos el poder llegar juntos de nuevo a la pelea por un título. Era el momento porque, además, en este torneo, varias parejas de la zona alta habían apostado por descansar cara al siguiente Major de Roma, que ya ha comenzado a rodar.

Aun así, no hubo rivales sencillos, los malagueños progresaron y se crecieron en cada ronda hasta firmar uno de sus mejores partidos del año en la semifinal, tumbando a Juan Tello y el exnúmero uno mundial Fernando Belasteguín en tres agónicos sets en la semifinal. Sin embargo, este desgaste de energía condenó en parte a la pareja cara a la gran final de este domingo, sobre todo a Álex Ruiz, que acusó el cansancio especialmente en el segundo set, ante la que partía como la pareja nº5 del torneo, Coki Nieto (nº 16) y Jon Sanz (nº 17). Rivales directos que ofrecieron esta vez una versión especialmente correosa.

Pasaron por encima a los malagueños en un primer set en el que Álex y Momo no pudieron ganar más que un juego (6-1), pero aun así, pese a las irregularidades en pista, fueron con todo en la segunda manga, apretando pese al cansancio acumulado. Este segundo set fue muy igualado, al saque hasta que Coki y Jon lograron el 'break' en el 5-4, persiguiendo cada bola, por complicada que fuera, hasta la saciedad. Tuvieron de nuevo una oportunidad de oro el antequerano y el alhaurino para devolverles hacer el 'contrabreak', pero se les complicó la situación.

El lado positivo es que al plantarse en esta final, Momo podrá subir un puesto en el 'ranking' y arrebatarle el 13º a Juan Tello, al que precisamente derrotaron en la semifinal. Álex permanecería en el 15º, con Coki Nieto pisándole los talones. A nivel anímico y pese al enfado por no haber podido sacar su faceta más agresiva, los malagueños pueden marchar con la cabeza alta y servirse de esta final como inyección de moral cara al siguiente gran reto del año: el Major de Roma, el segundo 'grande' de la temporada.