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«El deporte siempre nos pone desafíos y esta vez me ha tocado afrontar otro más». Así es como empieza el último 'post' de Instagram ... de María de Valdés. Tras la disputa del Campeonato de España de piscina en Sabadell, donde la nadadora fuengiroleña se colgó la plata en el 1.500 y el 800, se marchó junto al equipo nacional de aguas abiertas a un 'stage' a Brasil, cara a seguir entrenándose para el calendario de Copas del Mundo de aguas abiertas.
Fue pasada una semana allí cuando, en una prueba, acabó torciéndose todo. La malagueña sufrió una caída en una parte del recorrido en el que tenía que correr en la arena, por lo que tuvo que abandonar, además recibiendo asistencia al no poder andar. Finalmente, la olímpica sufrió una pequeña fractura en la meseta tibial interna y edema óseo y se encuentra ya en Málaga tratándose.
Por fortuna, pudo ser mucho peor. La nadadora estima que guardará tres semanas de reposo y después tendrá que comenzar con la rehabilitación. Lo más importante, es que ha evitado las intervenciones quirúrgicas. Eso sí, el aspecto negativo es que actualmente genera dudas su participación en la Copa del Mundo de Ibiza del 25 al 27 de abril, prueba que, además, es seleccionable para el Mundial de aguas abiertas.
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