Secciones
Servicios
Destacamos
Un camino de tierra deja ver a lo lejos un amplio terreno de césped, ovalado, con un espacio rectangular en el centro llamado 'pitch'. Es un campo de críquet, un deporte de origen británico y muy popular en los países del subcontinente indio. Sin embargo, la ubicación no corresponde a Inglaterra ni a India: es el 'Cártama Oval', el lugar de entrenamiento y juego de los equipos del Costa del Sol Cricket Club, y ahora sede por primera vez del Campeonato Europeo de Críquet, un evento retransmitido en más de 30 países con 40 millones de espectadores en todo el mundo.
Con 50 socios de diferentes edades, el Costa del Sol Cricket Club se divide en dos equipos: Costa Vikings y Costa del Sol Crusaders. Todos los jugadores entrenan en el campo de Cártama los fines de semana para luego competir con los otros equipos que forman parte de la liga del Sur de España: Málaga y Granada. «Este campo es uno de los mejores de Andalucía para el críquet. Desde el club nos encargamos de organizar todo para que los equipos puedan venir aquí a entrenar y jugar partidos», cuenta Jay Wild, presidente del Club Costa del Sol, que recalca que este espacio está abierto a todo el mundo. «Es un deporte muy sociable, para todas las edades. Cualquiera puede venir a probar, y si quiere puede incluirse en un equipo para jugar torneos locales, regionales e incluso nacionales».
Wild, nacido en Hertfordshire (Reino Unido) aterrizó en Marbella hace más de 20 años. Desde hace tres es el presidente del club de críquet, aunque ha estado ligado a él desde que llegó a España. La historia de este deporte en la Costa del Sol se remonta a mediados de los 80, cuando Thomas 'Gordon' Samuel, residente en Fuengirola y apasionado del criquet, leyó en una revista inglesa que un equipo británico se encontraba de gira y buscaba juegos de pretemporada en climas más cálidos. Tras una intensa búsqueda para encontrar un campo apto, el primer partido de críquet se celebró en 1985 en unos terrenos de Arroyo de la Miel, en Benalmádena. Fue entonces cuando se formó la Asociación de Cricket de Málaga, ahora convertida en el Club Costa del Sol. «Los fundadores organizaban partidos en diferentes campos de la provincia. Yo llegué en el 2000, y un día me invitaron para practicar en Marbella, no sabía que aquí se podía jugar al críquet», recuerda Wild.
Al no contar con un espacio fijo para jugar, los equipos malagueños formaban parte de la liga de Gibraltar. Jugadores de Marbella, Mijas o Sotogrande eran algunos de los participantes, ya que a finales de los años 90 el críquet había perdido seguidores y los clubes no contaban con equipos completos. «Yo formaba parte de uno de los equipos, el Combined Collegues, que fue uno de los fundadores de este deporte en la Costa del Sol. Con el paso de los años, el juego se reavivó, y conseguimos reactivar el críquet en Málaga», explica el actual presidente del club.
Fue en este momento cuando Cártama se convirtió en el lugar de referencia para el críquet. En 2012, a petición de un amigo interesado en este deporte, David Cooper transformó su terreno de 20 hectáreas en un campo de juego especializado. «Era un espacio multiusos, que dedicábamos al cultivo de césped para campos de golf», cuenta el propietario del actual 'Cártama Oval', que llegó a Málaga desde Blackpool (Gran Bretaña) hace 37 años. «Mi padre se dedicaba a la inversión inmobiliaria, vimos este terreno y lo acabé comprando yo».
Desde entonces, el campo de Cártama es el espacio de juego de los dos equipos de Costa del Sol, Cruisers y Vikings, que suelen competir con el de Granada, de reciente creación, y el de Málaga, que es el equipo resultante de los varios que iniciaron la actividad en los años 80. «En estos últimos tres años hemos buscado profesionalizar el club y poder optar a más reconocimiento. Cada vez contamos con más socios, de cara al año que viene queremos hacer un nuevo equipo, los 'Spartans'». Wild señala que la intención es conseguir 100 socios para formar este nuevo grupo.
Aunque la mayoría de socios son extranjeros residentes en España, cada vez son más los malagueños que descubren este deporte. «Hemos recibido a familias españolas que han vivido varios años en Gran Bretaña y han jugado al críquet. Al conocernos se han sorprendido, porque no sabían que existíamos y ahora pueden seguir practicando el deporte aquí».
Actualmente, el 'Cártama Oval' es uno de los campos base de este deporte en España. Según explica el presidente del club, actualmente son cuatro las comunidades españolas que cuentan con equipos de críquet: Andalucía, Murcia, Madrid y Barcelona. En el caso de Andalucía, los campos de juego se sitúan en Almería y en Cártama. «El de Almería tiene un nivel superior, pero no ofrece todas las posibilidades de Cártama. Estamos cerca del aeropuerto, y en un enclave que permite albergar a muchos jugadores y visitantes», explica Wild, que desde su llegada a la presidencia del Club Costa del Sol tiene un objetivo muy claro: conseguir que los malagueños practiquen críquet. «Tenemos profesores específicos para enseñar cómo se juega a este deporte. Es mi sueño, quiero que los niños españoles puedan jugar al críquet como jugaba yo de pequeño».
Tras acoger el campeonato europeo, el 'Cártama Oval' volverá a ser escenario internacional el próximo febrero, con la celebración del Campeonato Europeo de Ligas, en el que participarán clubes de varios países.
Desde el 13 de septiembre y hasta el 8 de octubre, Cártama es el centro neurálgico del críquet europeo. 400 jugadores procedentes de 15 países se dan cita en el European Cricket Championship 2021 (ECC21), un evento seguido por más de 40 millones de espectadores en más de 30 países. El concepto de 'European Cricket' se fundó en 2018 con la idea de desarrollar el críquet por toda Europa. «Es uno de los deportes que más crece en todo el mundo. No paramos, desde junio del año pasado hemos jugado más de 1.000 partidos en numerosos países, desde Alemania a Islandia», explica Roger Feiner, CEO de European Cricket, que resalta que este deporte se está dando a conocer cada vez más en Europa gracias a los jugadores británicos y asiáticos que viven aquí.
En este sentido, Feiner asegura que cada vez son más los clubes de críquet en Europa. «En los últimos seis años, Alemania ha pasado de tener 50 equipos a 360. En Cataluña ya son 26 los equipos de críquet. Es un crecimiento imparable».
European Cricket incluye 30 federaciones nacionales asociadas, con 6.000 clubes y miles de jugadores. Desde junio de 2019, la compañía ha celebrado eventos en 25 países.
El campeonato, que se prolonga durante 4 semanas, está compuesto de 3 semanas de fase de grupos y una semana de finales. Equipos procedentes de Escocia, Noruega, España, Suecia, Bélgica, Holanda, Austria, Rumanía, Portugal, Hungría, Inglaterra, Italia, Alemania, Finlandia y República Checa participan en estos juegos, que tienen una duración de 90 minutos por partido.
Tras tres semanas de clasificación, este lunes comenzará la Semana de las Finales que se desarrollará hasta el 8 de octubre. En ella participarán los seis mejores equipos del campeonato, entre los que se encuentra España. Asimismo, los dos subcampeones de cada grupo también jugarán en esta fase. Entre los clasificados se encuentran equipos como Inglaterra y Holanda.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Fermín Apezteguia y Josemi Benítez
Fernando Morales y Álex Sánchez
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.