El BeSoccer UMA, sin opciones ante un Movistar Inter sin piedad

Son ya nueve partidos sin una victoria entre todas las competiciones que encienden la luz de alarma en el cuadro malagueño, ya centrado en la permanencia en Primera, como objetivo principal a once jornadas del final y con seis puntos de colchón, y en el partido en Peñíscola del miércoles 22 para clasificarse para la Final Four de casa, en el Fernando Argüelles, y seguir defendiendo el título.

Pero en lo que concierne al duelo de anoche, hubo poca historia. Las sensaciones fueron pobres. Dos errores de vigilancia a los rechaces castigaron de salida al BeSoccer. Primero, en el minuto 6 el exjugador del cuadro malagueño Chillo, que había sacado el que originó la acción de ataque con un saque de banda, no perdonó tras un rechace a tiro de Fits. En el 8, Sepe definió de cuchara, en una acción similar. Eludió la vigilancia de su par para beneficiarse de otro rebote.

«No hemos hecho ninguna de las jugadas que tenemos ensayadas», se quejaba Tete a sus jugadores tras parar el partido de inmediato en un tiempo muerto. Les espetaba a los suyos que «seguimos dentro del partido». Siendo inquietante el 0-2, pero ni mucho menos definitivo, lo que más preocupó fue la dificultad del BeSoccer UMA para tener remate. Apenas un tiro de Pablo Ordóñez, tras una buena acción individual, y poco más.

Por contra, Fits remató al larguero, en otra cuchara, y Martel al poste de contraataque y a puerta vacía, tras una pérdida de Cone, que salvó a los suyos del 0-3 con un paradón ante Lazarevic. Tete quiso sorprender colocando a Burrito de portero jugador a cinco minutos del descanso, pero el Movistar Inter acaparó con inteligencia la posesión para no dar opciones apenas a su rival de un ataque organizado con ese efectivo más.

En la segunda parte, cuando apenas habían transcurrido treinta segundos, llegó el jarro de agua fría del 0-3, cuando Chillo lograba el doblete al sorprender de contragolpe a Chispi, que relegó a Cone, en una salida de la portería. La definición del cordobés fue muy fina.

El BeSoccer UMA estaba noqueado. Lo intentó ahora con una presión muy alta y mucha rotación de efectivos ante un Inter que daba una lección de madurez y de dominio de la situación. Martel volvió a rematar al poste y las ocasiones del cuadro malagueño se hacían esperar. Ni siquiera Óscar se aprovechó de un regalo para marcar, y en el otro lado de la pista Fits no perdonó ante una concesión de Chispi para el 0-4. No tuvo piedad alguna el Inter, que en un cuatro para tres en pista, por la segunda amarilla a Alvarito, marcó el 0-5, segundo de Fits, y luego hizo el sexto Drahovsky, castigando un nuevo error. El enésimo de los verdes.