Bea González se queda con la miel en los labios en la final de Francia

Era la cuarta final que afrontaba la jugadora paleña este año, siendo la tercera junto a Brea, con la que conforma la pareja nº3 de la clasificación internacional; unos resultados que hacen ver el potencial de esta unión entre jóvenes talentos. Sólo lograron levantar el trofeo en el Open de Dina-marca, por lo que haber levantado el de Francia hubiera supuesto una inyección de moral extra para ambas. Sin embargo, las números uno fueron más decisivas en esta ocasión.

Sánchez y Josemaría arrancaron como una moto la final, firmando en tiempo 'record' un 6-1 en el primer set, con bolas muy finas y un despliegue de talento y recursos por parte de ambas. Pero lejos de frustrarse, González y Brea hicieron borrón y cuenta nueva para firmar un segundo set mucho más agresivo, en el que lograron firmar un parcial de 4-1 a su favor. Pero cambiaron las tornas entonces; las líderes dieron un golpe sobre la mesa, aprendieron a contrarrestar las peligrosas bolas de sus rivales con cabeza y las pusieron contra las cuerdas adjudicándose tres juegos más. Por fortuna, no tuvieron tiempo de remontar y marcharon a la tercera manga.

Al contrario que en la segunda, Sánchez y Josemaría tomaron las riendas, con un 'break' de hasta 5-2; pero llegó la reacción de la malagueña y la argentina para firmar tablas (5-5), volviendo loco al pabellón. La igualdad se mantuvo hasta la última bola; por desgracia, el 'tie-break' final premió a las líderes.