Secciones
Servicios
Destacamos
Javier villanueva (Efe)
Madrid
Sábado, 7 de marzo 2020, 22:49
El Barça dio un nuevo paso hacia su séptimo consecutivo de la Copa del Rey, tras certificar su clasificación para la gran final, en la que se medirá este domingo (18:00) con el sorprendente BM. Benidorm, tras vencer este sábado por un claro 34- ... 23 al ABANCA Ademar de León en las semifinales.
Un encuentro en el que los de Xavi Pascual volvieron a dejar clara la enorme diferencia que separa en estos momento al todopoderoso conjunto azulgrana del resto de sus rivales nacionales, que ya de antemano tienen asumida la derrota.
Tal y como reconoció en la previa el entrenador del Ademar, Manolo Cadenas, que reconoció que se conformaba con poder aguantar algo más de los apenas diez o quince minutos que los leoneses habían logrado plantar cara al Barça en las dos ocasiones en las que se habían enfrentado anteriormente en esta temporada.
Sin embargo, poco más pudo aguantar el conjunto leonés en esta ocasión, que mediada la primera mitad ya contaba con una desventaja de seis goles (12-6) en el marcador, que dejaban prácticamente sentenciada la victoria del Barcelona.
Y eso que el portero croata del Ademar, Dino Slavic, arrancó la contienda con un par de buenas intervenciones, que hacía pensar en la posibilidad de que en esta ocasión sí, los de Manolo Cadenas podían inquietar a los azulgranas.
Un espejismo que se desvaneció a la misma velocidad con la que Slavic, que fue sustituido por el bielorruso Dzimitry Patotski, comenzó a encajar un gol tras otro.
Todo lo contrario que Kevin Moller, que con sus paradas comenzó a cimentar la escapada del Barcelona, que convirtió cada intervención del portero danés en un fulgurante contraataque.
Y cuando no fueron las frenéticas carreras del velocísimo Aleix Gómez, fueron exquisiteces como la «colgada» que firmaron el esloveno Jure Dolenec y el central Raúl Entrerríos.
Pero el Barcelona no atesora sólo más calidad que el resto de sus rivales, sino una mayor profundidad de banquillo, lo que le permite mover continuamente el banquillo sin que apenas se note la diferencia sobre la pista.
Incluso, como ocurrió este sábado ante el Ademar de León mediada la primera mitad, cuando Xavi Pascual cambia a la vez a los seis jugadores de pista. Un cambio que no sólo no frenó la voracidad de los barcelonistas, sino que pareció aumentarla, como reflejaron los nueve goles de ventaja (20-11) con los que se llegó al descanso.
Una renta que aumentó en los primeros cinco minutos de la segunda mitad en los que el Barcelona se disparó hasta los once goles de diferencia (24-13) con dos goles consecutivos de Aleix Gómez y de Aitor Ariño.
Ventaja con la que esta vez, ya sí, el Barcelona pareció por dar concluida la contienda, lo que permitió respirar a un Ademar de León, que pese a todo no logró reducir ni en un solo gol la diferencia, como reflejó el 34-23 final.
Un marcador que deja al Barcelona a un paso de su séptimo título consecutivo, en la que será la despedida de la Copa del Rey de dos iconos de balonmano nacional como Raúl Entrerríos y Víctor Tomás, que pondrán fin a sus carreras deportivas a la conclusión del curso
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Fallece un hombre tras caer al río con su tractor en un pueblo de Segovia
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.