Barça y Cartagena disputarán la final prevista en Antequera

Aunque después de dos partidos muy disputados, se cumplieron los pronósticos en la Final Four de la Copa del Rey de fútbol-sala, que se disputa con muy buen ambiente en el Fernando Argüelles de Antequera. El Barça, que busca su octava corona (en trece ediciones del torneo) y el Jimbee Cartagena disputarán este domingo el título (20.00 horas, Teledeporte) del torneo.

En la primera entrega el Cartagena lo pasó muy mal ante el Servigroup Peñíscola. De hecho, estaba eliminado a segundos del final del tiempo reglamentario, pero Motta, a treinta segundos del final, aprovechó un golpe franco sacado en corto (4-4). Ya en los penaltis, uno detenido a Paniagua por Raúl Jerez con la cara fue el que dio el pase.

El Peñíscola, que compite en Segunda División y está a punto de certificar su ascenso a Primera, había eliminado ya a tres rivales de la máxima categoría en el torneo, entre ellos al BeSoccer UMA Antequera, vigente campeón del torneo y que ya en 2022 fue capaz de completar la hazaña militando en Segunda.

Juanqui, con un control en el pecho y remate en el aire; Elías, en un contragolpe, y Agustín en el primer palo y en un saque de esquina colocaron con una renta de tres goles al Peñíscola, pero antes del descanso Juanan, en jugada individidual y Lucao, tras combiar con Mellado, dejaron el tanteo en 2-3.

Del posible empate del Cartagena, en un remate al larguero se pasó en segundos al 2-4, por medio de Cristian, pero reaccionó rápido el equipo murciano con un zurdazo de Javi Mínguez tras varios recortes. El desenlace fue el ya conocido. El Peñíscola se quedó con la miel en los labios. «Hemos tenido cabeza y éramos conscientes de que el partido no se acababa aunque empezáramos perdiendo», comentó el meta del Cartagena Raúl Xerez.

En la segunda semifinal, el Barça hizo los deberes ante el segundo clasificado de la Liga, el Palma Futsal, en un partido que dejó la mala noticia final de una preocupante lesión de rodilla de Sergio Lozano. El heptacampeón del torneo encarriló todo en el primer tiempo. Carlos Ortiz robó el balón capturando un rechace en un saque de falta rival y corrió a la meta rival para resolver, y el segundo llegó en un punterazo de Catela. Se iba con una buena renta al descanso el cuadro azulgrana, que se redujo pronto con un tanto de penalti de Tayebi.

Sin embargo, una diana de Ferrao desde los diez metros, al aprovechar el bonus de faltas rivales, permitió al Barça llegar con cierto colchón al tramo final, en el que pasó menos apuros de los previstos. Incluso, todo acabó con goleada, con un nuevo tanto desde diez metros de Ferrao para su doblete y uno de Pito a segundos del final. Sólo ese lance de Lozano, que se lastimó solo, aunque pudo salir de la pista por su propio pie, ensombreció todo.

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