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Tiene sólo 22 años y ya es toda una veterana en el mundo del balonmano-playa, al que llegó por casualidad y con el que ahora puede permitirse soñar muy alto. No es ningún secreto que España, y especialmente Andalucía, se trata de una de las mayores potencias mundiales de esta popular modalidad, aún alejada del profesionalismo pero que cada año lucha por un mayor reconocimiento. Dentro de la región son varios los nombres de la provincia que siempre han estado ligados a las selecciones nacionales. En categoría femenina, algunos como Pepa Moreno o Sole López (hace años) o actualmente las laureadas Asun Batista, Virginia Fernández (portera del Costa del Sol) y Alba Díaz, las tres malagueñas que hace menos de un mes se proclamaron subcampeonas del mundo con España, en Grecia.
La benjamina de aquel equipo fue esta última; sin duda, una de las grandes promesas nacionales de este deporte. «Soy la más joven de la selección y de mi equipo del playa, el AM Team Almería, pero a la vez parece que soy veterana porque no paro», reconoce. Tras pasar su infancia ligada a la gimnasia rítmica, conoció el balonmano por unas amigas del colegio que le invitaron a probar en un partido. Aquella dinámica alegre y competitiva encajó a la perfección con su forma de ser, por lo que no tardó en crecer exponencialmente. En pista, jugó con el Fuengirola El-Coto (llegó a la División de Plata), aunque también probó suerte en el Dominicios de Zaragoza, e incluso, en la tercera división francesa, de la que acaba de regresar.
¿Cómo acabó allí? «Me ofrecieron irme allí a jugar y acepté por vivir una experiencia nueva. Era la tercera categoría y allí esos equipos son como los equipos más flojitos de nuestra Primera División. Me gustó, pero al final no estuve contenta y decidí volverme a casa», explica. Ha vuelto en el mejor momento posible. Está viviendo el mejor verano de su carrera deportiva. Como buena parte de las jugadoras de balonmano pista, la época estival sirve para mantener el ritmo y disfrutar de la competición en la arena. En este mundo le adentró Diego Carrasco, cuando ella era cadete. No tuvo mal ojo; en su primer año, ya fue subcampeona de Europa de su edad. A los 18 debutó con las 'Guerreras de la Arena', la selección absoluta que también dirigía Carrasco. Además, el equipo más puntero de España, el AM Team Almería (antes Algeciras) también apostó por ella y no se equivocó.
Ahora, con 22 años, ya lo ha ganado prácticamente todo. Entre los grandes logros de su palmarés, esta joven fuengiroleña es tercera de Europa y subcampeona del mundo con la selección española absoluta; a nivel de clubes, cuenta con dos campeonatos de Europa, dos Champions, dos bronces europeos y seis títulos nacionales. A lo que hay que sumar todos los méritos que cosechó como cadete y juvenil. Si los premios económicos correspondieran a los trofeos, Díaz habría reunido una buena suma. Por desgracia, no es así.
Aunque desde las federaciones se está trabajando por la profesionalización de este deporte, aún es algo utópico. «Intentamos buscar patrocinadores, pero no nos da para ganar dinero, sino para financiar los viajes. Lo bueno es que si ganamos los torneos nos dan dinero, y nosotras que lo ganamos todo, solemos ingresar algo, pero el dinero es para el viaje y poco más. También tenemos que poner dinero de nuestro bolsillo», dice.
Aunque no deja de ilusionarse con la idea que desde hace años ronda en el 'mundillo' del balonmano-playa. Así lo explica: «Este es un deporte de espectáculo y muchos campeonatos que se están haciendo es con el ánimo de profesionalizarlo, intentamos que llegue a ser olímpico. De hecho, se está debatiendo que vayamos a París como deporte de exhibición, aún no hay nada cerrado, pero sólo que se esté hablando es ya un paso. Sería un sueño». Aunque por ahora, es sólo una idea, es consciente de que labrarse otro futuro profesional es obligado. De hecho, Díaz siempre ha sido una alumna aplicada: este año comenzará cuarto de Medicina. Lo que no impide que, siguiendo el ejemplo de otras jugadoras y compañeras, pueda seguir creciendo deportivamente.
La próxima temporada no será una cualquiera para la malagueña, que quiere evolucionar sobre la pista y en su tierra. Alba Díaz será uno de los refuerzos del Costa del Sol Málaga de Suso Gallardo. Aunque contará con ficha de jugadora del equipo filial de Plata, entrará en la dinámica del primer equipo, se entrenará con ellas y, en función de su rendimiento dependerán las oportunidades. «Será un sueño debutar en División de Honor y Europa, sin duda es un gran salto para mí. Llevo entrenando con ellas unos pocos meses, desde febrero, y ya voy entrando en la dinámica del equipo», explica. Espera impaciente este momento, aunque aún le quedan en su agenda algunos compromisos más sobre la arena.
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