Adrián Aguilar roza el cielo con un podio en su primer Europeo

Desde el club de patinaje El Tejar (Fuengirola), lo anunciaban de una forma especial: «Adrián hace historia en el patinaje andaluz, siendo el primer patinador en conseguir una medalla de Europa en la modalidad de libre. Ha realizado una gran competición, culminaba con un impresionante programa libre de gran nivel técnico y artístico», aseguraban en el mensaje dedicado a Aguilar.

En las imágenes de los programas que realizó Adrián Aguilar en el Europeo se puede ver esa elegancia, solvencia y maestría con la que el patinador hacía cada uno de sus movimientos, llenos de una técnica impecable que le han llevado a lo más alto de Europa. Pero antes de ese gran momento habían sucedido muchas cosas que le habían conducido a ese triunfo: la primera, el trabajo constante que ha realizado durante los diez años de entrenamientos en el mundo del patinaje; la segunda, la responsabilidad y disciplina que caracterizan a este deportista; la tercera, el verano intenso que ha dedicado a preparar el europeo, y, la cuarta, el gran apoyo de su familia, que no ha dejado que se rindiese.

Adrián Aguilar, durante el tiempo que lleva en el mundo del patinaje, había viajado por Portugal, Italia, Francia... Pero ninguna vez había participado en un campeonato europeo como este, por eso es que sabía que tenía que prepararse muy bien. El 6 de agosto viajó a Italia para estar durante unas semanas preparando el campeonato y también con tecnificaciones en Barcelona, Adrián Aguilar no dejó ni un segundo del verano desaprovechado para llegar listo para la competición en Riccione (Italia). Y ahí estaban junto a él su entrenadora Angélica Morales, la coreógrafa Natalia Baldizzone y Alina Sabaté.

Unas semanas antes del Campeonato de Europa, así lo analizaba para SUR: «Hacer la combinación de todo lo que se entrena a lo largo del año no es fácil en dos minutos de disco: los saltos, las piruetas...». Pero ahora lo ha logrado y solo piensa en seguir y seguir trabajando: «Ahora, a seguir trabajando más para el año que viene; hay que seguir y seguir...», insiste el joven deportista malagueño.

Pero hay un complemento que para Aguilar es esencial: su familia. Ellos vivieron el campeonato desde España y su madre, Carlota, no puede evitar emocionarse al recordarlo: «¿No oíste los gritos? Cuando lo vimos fue una explosión de no sé... No me salen las palabras», recuerda el momento que supieron que su hijo era subcampeón de Europa. «Todo esto es el trabajo de Adrián, todo su esfuerzo, tantas horas, entrenamientos... Y su padre, que lo ha acompañado siempre a todos los entrenamientos y que le hace los trajes», añade Carlota. Su padre, Juan, también valora con emoción el trabajo de Adrián: «Es una gran satisfacción, todo esfuerzo al final tiene recompensa», apunta.

Ahora, Adrián Aguilar acaba de iniciar sus estudios en primero de Bachillerato en el colegio El Pinar y lo va a seguir compaginando con el patinaje, que es su gran pasión. Aunque, según su madre, hay algo que este joven tiene que hacer: «Creérselo. Él no es consciente de lo bueno que es», asegura Carlota. Y dentro de poco tiene un nuevo evento: la Copa de Europa de solo danza que se disputará del 2 al 7 de noviembre en Portugal, y en la que el malagueño seguirá buscando rozar el cielo del podio.