La Peña Deportiva, primer rival del Marbella en su camino a Segunda

El vicepresidente del Logroñés, Juan José Guerreros, extrajo la bola verde del Marbella y la amarilla de su oponente, la Peña Deportiva, en el pantalán de Puerto Banús rodeado de yates millonarios en un acto acotado para medio centenar de personas, la mayoría directivos de clubes y de la federación regional, con la alcaldesa de Marbella Ángeles Muñoz como anfitriona. Tanto el cuerpo técnico como los futbolistas del equipo malagueño no mostraron públicamente su preferencia por el club insular frente al Cornellà o el Valladolid Promesas, pero sí confesaron que sobre el papel era el adversario más accesible y los números les dan la razón.

Cuando el contexto es subir a Segunda, utilizar el símil de 'cenicienta' no es el más acertado. Con la premisa de que todos los aspirantes son peligrosos, los datos dicen que el club entrenado por Raúl Casañ es el que peores guarismos presenta. Es el equipo con más derrotas (9) y con la defensa menos consistente (41 goles encajados en 28 partidos). El entrenador del Marbella, David Cubillo, se mostró cauto con el emparejamiento. «Son muy competitivos y dominan muy bien los registros de un equipo de Segunda B. Estoy seguro de que será bastante igualado y complicado, más si cabe siendo una eliminatoria a partido único. Son muy aguerridos y en su campo se han mostrado muy fuertes», señaló a SUR.

El adalid del proyecto ambicioso del Marbella, Óscar Ribot, mostró su confianza en el equipo con el máximo respeto para el rival: «Creo que es un gran equipo al que tenemos que respetar muchísimo. No hay favoritos porque es un 'play-off' muy extraño. Nos toca dar un paso hacia delante. No tenemos complejos, llegamos aquí para llevar al Marbella a Primera», comentó a este periódico.

Cabe recordar que los partidos están previstos a puerta cerrada como propuso la Federación Española tras consultar con el Consejo Superior de Deportes.