El Marbella salva un punto (1-1)

El Marbella tuvo que contentarse con un punto sumado en la recta final ante un ordenado y rocoso Mérida que mostró sus garras en la segunda parte con el marcador a favor. En la primera mitad los locales generaron ocasiones para lograr un marcador favorable al descanso, pero la pelota no quiso entrar.

De salida, dominio local moviendo con criterio el balón de una a otra banda con especial protagonismo en el flanco diestro gracias a un omnipresente Zelu. El gaditano desbordaba, se asociaba bien con el centro del campo. No pisaba aún área rival el cuadro costasoleño ante un replegado Mérida que no ejecutaba un movimiento que no fuera totalmente seguro. Sin reparos, elevaba el balón al cielo oscuro de Marbella para evitar cualquier susto. Pasados los diez minutos, cayó un chaparrón de esos que, unido al viento, impedía incluso la visión de los jugadores con las camisetas totalmente pegadas al cuerpo como licras.

Lejos de entorpecer el juego la intensa lluvia, la pelota empezó a correr mejor sobre un césped que aguantaba en perfectas condiciones. La primera llegada tuvo sello extremeño con una falta lateral cuyo remate abortó Cebriá en dos tiempos. Fue la tentativa más clara de los de Ángel Alcázar. La siguiente jugada debió ser la acción del primer gol marbellí por su belleza. Corría el minuto 22 cuando el incisivo Zelu metió desde la derecha un centro con remate certero de Juanfri que rechazó a bocajarro Raúl Moreno. El balón suelto lo enganchó Sergio Narváez encontrándose de nuevo con un inspirado meta visitante. Cinco minutos después, idéntica oportunidad con servicio de Zelu, esta vez con un primer remate de Narváez y una segunda acción de Juanfri que salvó Raúl Moreno.

Con una intentona lejana de Borja Romero que atajó Cebriá expiró la mojada, intensa y física primera parte. En la reanudación cesó la lluvia, pero se levantó el vendaval marbellí. Salida en tromba con llegadas por la izquierda de Sergio Rodríguez encontrando los disparos de Narváez, Juanfri y hasta Álex Herrera. Fueron diez minutos de explosividad que no se tradujo en el marcador. Y lo cruel que suele ser el fútbol. En el mejor momento local César Morgado cabeceó a la escuadra derecha de Cebriá un córner para establecer el 0-1 cuando se cumplía una hora de partido.

La respuesta al tanto desde el banquillo local se tradujo en la entrada de Fabiani para jugar con dos delanteros puros. El ariete internacional se mostró participativo y generó incertidumbre entre la zaga emeritense hasta el punto de solicitar un penalti. El Marbella dejaba espacios y en un contragolpe Cebriá salvó un mano a mano a Joaquín Flores con todo a favor. Enmudeció el Municipal ante lo que pudo ser la sentencia. Comenzaba a sentirse cómodo el Mérida esperando ordenado y llevando peligro con el balón. Volvió a estar cerca del gol con un disparo de Borja Romero peligroso que atajó Cebriá.

Acusó en exceso el Marbella el 1-0 y, pese a tener la pelota, no se probaba al guardameta mientras Pedro Conde pudo volver a marcar de cabeza. Eso de la justicia divina hizo acto de presencia en el minuto 87 con el empate de Rubén Durán. Parecía que el balón no quería entrar porque el gol llegó tras tres remates seguidos en el área chica de Juanfri con respuesta del portero; Fabiani, que se encontró con el larguero, y el ex del Racing, que por fin materializó la igualada con la testa en el área pequela. La tensión era máxima, más aún con un nuevo saque de esquina en el que Godoy casi encontró el marco de Cebriá. Si en el último compromiso en el Municipal el Sevilla Atlético sumó un punto en el 85, esta vez fue el Marbella quien rescató algo positivo en la recta final cuando asomaba la segunda derrota seguida.