Una de cal y otra de arena en el debut olímpico de Alberto Díaz. El base cajista, que continúa la historia del baloncesto malagueño en los Juegos como el tercer jugador en alcanzar el olimpismo (tras Berni y Nacho Rodríguez), no tardó en salir a la cancha en Francia, lo hizo ya desde el primer partido de la fase de grupos y con bastantes minutos de juego. Sin embargo, el resultado colectivo no fue el deseado.
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España se estrenó este sábado en el llamado 'grupo de la muerte' ante la selección que alcanzó el bronce olímpico en Tokio 2021: Australia. Pese a que hubo compases en los que pareció que la remontada podía ser incluso factible, el cuadro rival dominó de inicio a fin y evitó rápidamente esa posibilidad, logrando el triunfo por +12 puntos (92-80) en el Pierre Mauroy de Villeneuve-d'Ascq.
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El malagueño salió por primera vez a la pista en el segundo cuarto, y de nuevo a finales del tercero y casi durante la totalidad del último. Lo logró ver canasta, pero sí aporto un rebote y tres asistencias. Esta vez, el papel de Alberto fue dar mayor movilidad de balón, repartir pases, y sobre todo, contribuir a nivel defensivo. Sin embargo, el acierto de triple de los australianos complicó la tarea. El siguiente partido de España será el martes 30, ante la Grecia de Spanoulis, a las 11.00 horas.
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